Además de las preocupaciones por las retiradas de vehículos Toyota, una serie de tormentas de nieve mantuvo a los consumidores lejos de los concesionarios el mes pasado.
La débil cifra de ventas se suma a la preocupación de que la recuperación de la economía desde el peor bajón desde la década de 1930, se malogre en el segundo semestre si el gasto sigue frágil.
Los despachos de Toyota cayeron cerca de un 9 por ciento el mes pasado, presionados por una crisis de seguridad que llevó a su presidente, Akio Toyoda, a comparecer en una comisión de investigación del Congreso estadounidense.
El inusual descenso estuvo encabezado por un descenso de las ventas de casi un 20 por ciento de su sedan más popular, el Camry, y llevó a Toyota a ampliar fuertemente sus incentivos en marzo, en un intento de atraer a clientes indecisos.
Por el contrario, las ventas de Ford subieron un 43 por ciento impulsadas por ventas de su modelo Fusion, que compite con el Camry, que se duplicaron frente al año pasado.
El jefe de ventas de Ford, Ken Czubay, dijo que el Fusion estaba ganando nuevos clientes para la empresa en seis de cada 10 ventas. El directivo señaló que el modelo es el símbolo de la estrategia de la empresa de ganar cuota de mercado sin entrar en una guerra de precios.
General Motors registró un alza de las ventas de casi un 12 por ciento, pero se vio castigada por una escasez de inventario de modelos nuevos con alta demanda como el Chevrolet Equinox.
GM señaló que ofrecería una serie de financiamientos al cero por ciento para los vehículos de 2009 y 2010 y anunció una reestructuración ejecutiva que coloca la responsabilidad de las ventas en el presidente para Norteamérica, Mark Reuss.
Jack Nerad, analista de Kelley Blue Book, dijo que GM sigue sufriendo un "síndrome post bancarrota".
Los principales rivales de Toyota ganaron terreno. Las ventas de Nissan Motor Co subieron un 29 por ciento y las de Honda Motor Co avanzaron un 12 por ciento.
Incluso Chrysler, considerada la más débil de las grandes automovilísticas por su falta de nuevos modelos, tuvo un rendimiento mejor que el de Toyota, con ventas estables en febrero, en comparación con el año anterior.
En un intento de recuperar el impulso para sus ventas en marzo, Toyota se prepara para ofrecer financiación al cero por ciento por 60 meses en sus modelos más populares de 2010, incluyendo el Camry y el Corolla, según personas cercanas a sus planes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario