martes, 7 de abril de 2009

Chaves, Blanco, Sinde, Jiménez y Gabilondo entran en el Gobierno

MADRID.- El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy la nueva composición del Gabinete. Se incorporan Manuel Chaves, que será vicepresidente tercero y ministro de cooperación terroritorial; José Blanco como ministro de Fomento, Trinidad Jiménez, como titular de Sanidad, mientras que el rector de la Universidad Autónoma de Madrid, Angel Gabilondo asume el ministerio de Educación.

Por su parte, Elena Salgado deja la cartera de Administraciones Públicas para convertirse en vicepresidenta para Asuntos Económicos, en sustitución de Pedro Solbes. La nueva ministra de Cultura será Angeles González Sinde, actualmente presidenta de la Academia de Cine. Dejan el Gobierno Mercedes Cabrera, Pedro Solbes, Magdalena Alvarez, Bernat Soria y César Antonio Molina.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero anunció la primera gran remodelación del Ejecutivo que configuró tras su segunda victoria electoral, el 9 de marzo de 2008.

Cuando faltan tres días para que se cumpla un año de la formación del Gabinete con el que encaraba su segunda legislatura, el presidente del Gobierno anunció hoy el séptimo cambio en su equipo de ministros desde que en 2004 ganó las elecciones generales.

Con estos últimos cambios, cinco años después de que Zapatero ganara sus primeras elecciones, María Teresa Fernández de la Vega, Miguel Angel Moratinos y Elena Espinosa son los únicos ministros que continúan formando parte del Gabinete socialista.

El Banco de España afirma que la mala gobernanza de CCM socavó gravemente su solvencia

MADRID.- El Banco de España intervino Caja Castilla-La Mancha (CCM) por la "deficiente" gobernanza de la entidad del equipo directivo, que llegó a "socavar de forma muy grave la solvencia y viabilidad" de la caja de ahorros que hasta ahora presidía Juan Pedro Hernández Moltó.

Así figura en el documento de la comisión ejecutiva del Banco de España en su sesión del pasado 28 de marzo, cuando el organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez decidió hacerse con la gestión de la entidad, la primera intervención desde que estalló la crisis financiera.

El texto resalta que el equipo directivo de CCM sobrevaloró el ciclo expansivo y asumió una exposición excesiva al sector inmobiliario, tanto a través de la financiación directa como de participaciones en empresas del sector, sin ser capaz de reaccionar cuando el deterioro de la situación se hizo manifiesto.

La situación de la entidad se volvió "insostenible" ante la continua retirada de depósitos, coincidiendo con la cerrazón de todas las vías de financiación interbancarias ante la bajada de 'rating' hasta 'BB+' que tuvo lugar el 19 de febrero, y sin activos aptos para su descuento ante el sistema europeo de bancos centrales.

Estos hechos obligaron a la caja castellano manchega a solicitar una provisión urgente de liquidez por importe máximo de 900 millones de euros ante su incapacidad para hacer frente a sus obligaciones

El Banco de España advierte además que, aunque la entidad presenta un patrimonio neto positivo, la situación "empeorará sensiblemente" si se tienen en cuenta los 600 millones de euros de ajustes al patrimonio neto que, previsiblemente, se derivarán de la inspección en curso.

Según los datos del organismo, la inversión crediticia de CCM presenta una fuerte concentración en el sector promotor-constructor por encima del 40% de la inversión crediticia, así como en empresas de su propio grupo económico.

"Una parte de estas concentraciones se explica por la presencia de empresarios relacionados con el sector promotor que, financiados en su mayor parte por la caja de ahorros, participan conjuntamente con ella en inversiones y proyectos inmobiliarios", indica el documento.

La morosidad durante el último ejercicio se deterioró "rápidamente", resalta el informe, ya que su ratio pasó del 0,5% al 5,1% del total de la inversión, mientras que su cobertura se adelgazó desde el 385% hasta el 36%.

La entidad trató de encontrar una solución de integración con otras cajas de ahorros que suponía la percepción de ayudas por parte del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) de cajas de ahorros, pero esta solución "ha devenido imposible", dice.

En la actualidad, el órgano de administración de CCM está en manos de Jorge Pérez Cerdá Silvestre, Carlos Miguel Hervás Arnáez, y Raúl Hernández Pardo, con todas las facultades para nombrar el equipo de dirección; dirigir, controlar y ejecutar la actividad de la entidad; diseñar las medidas necesarias para afrontar la situación, y conceder y revocar poderes.

El Banco de España hizo requerimientos a CCM sobre la inversión crediticia y la liquidez en 2007, que se tradujeron en un aumento de los saneamientos y ajustes en resultados por importe de 441 millones de euros.

Entonces se incrementaron las provisiones específicas de la cartera crediticia en 245 millones de euros, de las que sobre estados de diciembre faltan por dotar en torno a 60 millones, y se constató un deterioro de instrumentos de capital por valor de 296 millones de euros.

El instituto emisor instó además a la entidad financiera a reconducir su "inestable estructura de financiación", reduciendo su apelación a los mercados mayoristas, pero la entidad no ha mejorado su situación, ya que ha sido incapaz de incrementar los depósitos de su clientela por encima de su inversión crediticia.

Ante la "frágil situación de la entidad" se comenzó otra inspección, continuación de la anterior, centrada en la revisión de la corporación, de la liquidez y la cartera de inversión crediticia, de la que, probablemente, se derivarán ajustes al patrimonio neto que superarán los 600 millones de euros.

CCM, resultado de la fusión de tres cajas de Castilla y León en 1992, cuenta con un volumen de balance superior a 26.000 millones de euros, con cuotas de mercado de depósitos en la Comunidad Autónoma del 27%, así como con una red de 3.200 empleados y 600 sucursales.

Trabajadores de Ford Almussafes rechazan con un 48% de los votos la propuesta de convenio de la empresa

VALENCIA.- Los trabajadores de la planta de Ford en Almussafes rechazaron en el referéndum celebrado hoy, con un 48,13 por ciento de los votos, la propuesta de convenio colectivo presentada la pasada semana por la dirección, que fue aprobada por el comité de empresa con los votos de UGT, y recoge las principales demandas del sindicato mayoritario, como los cinco años de vigencia, el incremento salarial según el IPC previsto y un plan de jubilaciones con relevo.

Del total de 5.282 votos emitidos, un 45,95 por ciento --2.427 trabajadores-- se pronunciaron a favor de la propuesta presentada por la dirección, y un 48,13 por ciento en contra --2.542 trabajadores--, mientras que se registraron 240 votos nulos y 73 votos en blanco.

Al cierre de las urnas, que tuvo lugar a las 19.00 horas, se habían acercado a votar 5.282 trabajadores del total de 6.933 que posee la planta valenciana, un 76,19 por ciento de la plantilla.

Según informaron fuentes de la multinacional automovilística, las votaciones comenzaron a las 3.00 horas con la participación de los trabajadores del turno de noche, y se desarrollaron con "total y absoluta normalidad" durante todo el día para que pudieran pronunciarse también sobre la propuesta los empleados de los turnos de mañana y de tarde.

Desde la dirección explicaron que a partir de este momento, la compañía queda "al margen" del proceso de discusión de la propuesta de convenio colectivo, de modo que "es el comité de empresa el que tiene que tratarlo" y determinar los pasos a seguir.

El secretario general de UGT en la planta, Gonzalo Pino, destacó que "sólo cabe aceptar el resultado que los trabajadores acaban de ofrecer con sus votos en las urnas". "Esperábamos el respaldo a la propuesta de convenio que había hecho la empresa, pero los trabajadores, en base también al planteamiento que han hecho otros grupos, han respondido más al rechazo, así que lo aceptamos", dijo.

Pino avanzó que convocarán al comité de empresa "a la vuelta de las vacaciones", el 20 o el 21 de abril, una reunión en la que "ya sin ninguna propuesta, habrá que empezar de cero y escuchar a aquellos grupos que han hecho un planteamiento diferente que ha derivado en el rechazo de lo planteado por la empresa, para estudiar otras alternativas".

Recalcó que desde UGT permanecerán "atentos a escuchar esas alternativas y propuestas" del resto de organizaciones sindicales, aunque alertó de que los resultados del referéndum "dejan a la planta en una situación bastante compleja".

Por su parte, el responsable de Comunicación de la Federación de Industria de CCOO-PV, Juan José Picazo, indicó que están "verdaderamente satisfechos del respaldo de los trabajadores" al planteamiento defendido junto a CGT y STM por considerar que "lo que la empresa deseaba era recortar los derechos y UGT estaba dispuestos a cederlos".

Picazo recordó que CCOO defendió durante todo el proceso "ya no sólo que no había que firmar este acuerdo que llevaban UGT y Ford, sino que no era momento de negociar el convenio, ya que hay un ERE aún aplicándose y otro pendiente de aprobarse".

"Lo mejor era prorrogar el convenio actual, pero insistieron en seguir y, de la noche a la mañana, presentaron una propuesta que suponía recortes de derechos sin garantizar el futuro de la planta", relató el responsable de CCOO, quien valoró que el tiempo les ha "dado la razón" en que "la propuesta pactada por la empresa y UGT ni garantizaba el empleo ni la estabilidad de los trabajadores".

La secretaria general de CGT, Francisca Cuesta, resaltó que el resultado del referéndum es "fruto del trabajo que se ha hecho desde los tres sindicatos --CCOO, CGT y STM-- con los trabajadores, pero sobre todo, es la respuesta clara que han dado los trabajadores a la empresa y al sindicato mayoritario, denunciando que la propuesta acordada en 2007 con Ford Europa implicaba una renuncia a muchos de sus derechos".

"Por eso la han rechazado", sentenció.

Cuesta estimó que "ahora, el proceso lógico y legal sería volvernos a reunir todos sindicatos y mantener un esfuerzo y un trabajo conjunto para dar una respuesta a los trabajadores que han votado, y que han demostrado con sus votos que no quieren la propuesta que estaban poniendo encima de la mesa la empresa y el sindicato mayoritario", concluyó.

El Papa concede al vicario general de la Curia de la archidiócesis la máxima condecoración a un sacerdote

VALENCIA.- El Papa Benedicto XVI ha nombrado al vicario general y moderador de la Curia de la archidiócesis de Valencia, Eduardo Margarit Solbes, Protonotario Apostólico Supernumerario, con lo que le ha concedido el título pontificio de mayor rango que se le puede otorgar a un sacerdote en la Iglesia, según informaron hoy en un comunicado fuentes del Arzobispado de Valencia.

Esta distinción, que ha sido concedida a petición del cardenal Agustín García-Gasco, ha sido otorgada a Margarit, de 82 años, en reconocimiento a "la ejemplar entrega a la Iglesia durante toda su vida", según explicaron las mismas fuentes.

Eduardo Margarit Solbes, que es también canónigo de la Catedral de Valencia, nació en Muro de Alcoy (Alicante) en 1927 y recibió la ordenación sacerdotal en Gandia (Valencia) en 1953.

Ha sido vicario parroquial en Benaguacil (Valencia), párroco en las localidades valencianas de Genovés y Horno de Alcedo, consiliario diocesano de la Juventud Agrícola y Rural Católica, vicario episcopal, canciller-secretario y vicario general, destacaron.

Además, es miembro del Colegio de Consultores de la archidiócesis de Valencia, del Consejo Diocesano de Asuntos Económicos y de la Comisión de Límites Territoriales de Parroquias y Arciprestazgos.

La distinción concedida por el Papa le será entregada por Agustín García-Gasco en el transcurso de una celebración solemne que tendrá lugar el jueves 16 de abril en el Salón del Trono del Palacio Arzobispal de Valencia, apuntaron las mismas fuentes.