VALENCIA.- Los reyes Felipe VI y
Letizia y la comitiva de autoridades que les acompañaban este domingo
en su visita a Paiporta, la considerada 'zona cero' de la
DANA en la provincia, han sido recibidos con gritos e insultos y con
lanzamiento de objetos y barro durante su recorrido por las calles de la
localidad.
La comitiva se ha roto y en la cabeza han quedado
el monarca y el 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, separados
del resto. Mientras estaban andando, decenas de personas les han gritado
y lanzado objetos y barro. Agentes de Policía y Guardia Civil y
militares han tratado de contenerles y proteger a las autoridades
Durante los altercados, Felipe VI y Mazón se han parado a hablar con
varias personas, al igual que Letizia, que ha quedado en otro grupo y se
le ha visto compungida abrazando a algunos afectados.
Tanto
al rey como al jefe del Consell se les ha visto con manchas de barro en
la cara y en la ropa. Se han escuchado gritos de 'asesinos', 'fuera',
'ayuda', 'Mazón dimisión' o 'Pedro Sánchez dimisión'. Y los efectivos de
seguridad han intentado proteger a Felipe VI con paraguas.
El quinto día de la dana ha estado marcado por la tensión e
indignación de decenas de personas en Paiporta, que han recibido con
gritos de ‘fuera’ y con lanzamiento de barro a la comitiva de los reyes,
en la que también estaban el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y
el de la Generalitat, Carlos Mazón.
Cientos de voluntarios y
vecinos han interrumpido las tareas de limpieza de las calles y sótanos
al ver llegar a la comitiva con repetidos gritos de “fuera, fuera” y el
lanzamiento de barro y lodo, que ha alcanzado a los reyes y al resto de
autoridades.
En un momento dado, al comienzo de la visita y entre gritos de
“asesinos”, se ha visto caer un palo de escoba o de pala junto a la zona
donde se encontraba el presidente Sánchez y, a partir de ese momento,
ha sido rodeado por su equipo de seguridad.
Se le ha dejado de ver mientras crecía el tumulto y parte del
dispositivo de seguridad abría un paraguas para proteger a la comitiva
del barro y piedras que lanzaban los vecinos.
Los voluntarios se han encarado con el rey y el resto de políticos, y
don Felipe y doña Letizia, ya sin paraguas y cada uno por su lado, han
detenido el paso para hablar con algunos de los jóvenes que se les
acercaban muy alterados, con el propósito de tranquilizarles.
Con
la cara manchada de barro, igual que su abrigo, el rey, acompañado por
momentos por el presidente Mazón, ha seguido avanzando por una de las
calles principales de esta localidad y ha dialogado con alguno de los
vecinos indignados.
La reina también se ha parado con varias personas mientras seguían
los gritos de ‘fuera, fuera’ y algunos insultos dirigidos a todas las
autoridades, y al menos un escolta de doña Letizia ha sufrido una herida
visible en la frente.
Mientras un dispositivo de seguridad
intentaba establecer un cordón de seguridad en torno al rey, una unidad
de caballería del dispositivo policial ha intervenido para alejar a los
más exaltados.
La visita de los reyes, Sánchez y Mazón a la localidad valenciana de
Chiva, una de las más afectadas por la dana, ha sido suspendida tras los
altercados registrados en Paiporta, por acuerdo conjunto de las
autoridades estatales, autonómicas y de la Casa Real, han informado fuentes de Zarzuela.
La decisión se ha adoptado pasadas las
tres de la tarde y después de que los reyes Felipe y Letizia abandonaran
en torno a las 13 horas la localidad valenciana de Paiporta, tras
permanecer allí para poder acompañar a los vecinos a pesar de las
protestas con las que fueron recibidas las autoridades.
Cientos de personas congregadas en Chiva a la espera de la llegada de
los reyes han proferido abucheos tras cancelarse la visita de los
monarcas y del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de la Comunidad
Valenciana, Carlos Mazón.
“El pueblo unido jamás será vencido”,
han gritado varias de las personas que esperaban a la comitiva y se han
quejado de la “cobardía” de las autoridades por no acudir.
Los
congregados en una de las calles principales de Chiva han seguido
después aplaudiendo los tractores y voluntarios que se dirigían a seguir
con las labores de reconstrucción de esta localidad, una de las más
afectadas por la dana, tras saberse que se suspendía la visita.
La visita no parecía oportuna
Por su parte, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha
considerado que no era el momento "más oportuno" para que el presidente
del Gobierno, Pedro Sánchez, y los reyes visitaran las zonas afectadas
por la DANA en la Comunidad Valenciana debido a la "indignación" que
sienten los ciudadanos, al tiempo que ha condenado la "actividad
organizada" contra Sánchez, que ha tenido que salir escoltado tras ser
insultado y haber sufrido un intento de agresión con un palo.
Puente ha señalado que las imágenes de los insultos a los monarcas a
Sánchez y al presidente de la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón, en
Paiporta, le han dejado "mal cuerpo" si bien se ha mostrado comprensivo
con la indignación de los ciudadanos afectados.
"Hay una sensación, en
algunos casos, de abandono. De que lleva tiempo esperando una ayuda que
no llega en la dimensión que la gente querría", ha dicho en una
entrevista este domingo en La Sexta.
En este sentido, se ha referido a la "disyuntiva" que se produce en
una catástrofe de estas características que, a su juicio, "no es fácil
de resolver" y que responde a la decisión de "acercarte al lugar donde
la gente está sufriendo para trasladarles el apoyo y el aliento a riesgo
de ser considerado como un oportunista" y a la vez "recibir el
improperio" o "no hacerlo".
"Es una disyuntiva difícil de
resolver y exige, probablemente, mucho sentido de la oportunidad y quizá
en este caso pues probablemente no era el momento más oportuno", ha
dicho.
Según ha explicado, la decisión de visitar Valencia ha
sido "responsabilidad de todos" y tomada con la "mejor de las
voluntades" aunque, a su juicio, quizás no se hayan medido lo suficiente
los tiempos y no se haya tenido "la suficiente prevención en relación
con la indignación que se iba a encontrar la comitiva".
"Es
posible que se haya errado en el cálculo, pero no cabe responsabilizar a
nadie en concreto. Yo creo que es un error colectivo y un error que, en
todo caso, no se ha hecho con ninguna mala voluntad sino con la idea de
trasladarle al pueblo de Valencia el afecto, el apoyo y el respaldo de
las instituciones en un momento de enorme sufrimiento", ha apostillado.
En sus palabras, estos
actos no son tolerables "en ningún caso" y ha defendido al mismo tiempo
que la indignación "hay que entenderla, hay que comprender la rabia que
siente la gente que ha perdido sus vidas o familiares pero es
"inadmisible" el uso de la violencia.
En este punto, ha
insistido a los ciudadanos afectados que Valencia "se va a reconstruir",
que "confíen en sus instituciones" y que no escuchen "discursos fáciles
de 'el pueblo salva al pueblo'".
"El pueblo por supuesto que salva al
pueblo, por supuesto que es necesaria la labor de los voluntarios, pero
hay mucha gente involucrada que forma parte de ese Estado del que todos
nos hemos dotado", ha defendido.
Preguntado por si se ha
abierto una investigación o habrá consecuencias para los ciudadanos que
han golpeado el coche en el que iba el presidente, Puente ha dicho que
desconoce esa información si bien ha defendido que la haya por la
"utilización de la violencia".
"Es lógico", ha señalado.
Eso
sí, ha
sostenido que "eso estará en este momento siendo investigado por el
Ministerio del Interior".