En concreto, han recorrido el centro de la ciudad la manifestación
convocada por la Coordinadora Feminista de Valencia y la de la Assemblea
Feminista.
Las calles de Valencia se han teñido de color morado, muy presente en
la ropa y las banderas de numerosas manifestantes, y las batucadas, la
música y los silbatos también han sido protagonistas de ambas marchas,
que se han visto bañadas por una ligera lluvia en los últimos momentos.
La dana ha estado en el centro de las dos manifestaciones, en las que
también se han escuchado cánticos de 'Mazón dimisión'.
La convocada por la Coordinadora Feminista ha arrancado en la calle
Colón y ha recorrido Xàtiva, Marqués de Sotelo, la plaça de
l'Ajuntament, San Vicente y ha llegado a la plaça de la Reina. Ha estado
encabezada por una pancarta con el lema 'Dones caminant endavant', que
las asistentes han manchado de barro con sus manos.
También se han visto
otras como 'No son clientes, son puteros'; 'Tu chiste machipirulo me
tiene hasta el culo'; o 'Voy a ser la niña que yo quiera ser'; y
cánticos como 'Visca, visca, visca la lluita feminista' o 'El feminismo
camina para delante, el machismo camina para atrás'.
Pilar Tormo, vecina de Massanassa y quien ha ejercido de portavoz de
las participantes de l'Horta Sud --la más afectada por la dana-- ha
denunciado que «en todas las catástrofes, los problemas de violencia y
de las mujeres quedan en segundo plano».
«En la dana han sufrido todas
las infraestructuras, pero además los recursos sociales, y sobre todo
los de las mujeres», ha alertado.
En esta protesta han participado representantes políticos, como la
ministra de Ciencia, Innovación y Universidades y también secretaria
general del PSPV-PSOE, Diana Morant; la delegada del Gobierno en la
Comunitat y secretaria de Igualdad del PSOE, Pilar Bernabé; el
secretario de Estado de Política Territorial, Arcadi España, o la
portavoz de Compromís en el Congreso, Àgueda Micó.
Morant ha lamentado que, «en cualquier crisis, siempre las personas
más vulnerables sufren más».
«Las mujeres siempre tienen peores
condiciones en las crisis y también ha sido en esta crisis de la dana»,
ha indicado.
En la plaça de la Reina se ha procedido a la lectura del manifiesto
por parte de dos vecinas de l'Horta Sud, en el que han resaltado el
feminismo como «una fuerza transformadora que cuestiona y desafía las
estructuras de poder patriarcales» y la lucha «contra la desigualdad, la
discriminación y la violencia que sufren las mujeres en todo el mundo»,
para lo que han abogado por «considerar todas las interseccionalidades
para hacer frente al machismo».
Asimismo, han reconocido a las mujeres afectadas por la dana y «sobre
todo por la incompetencia institucional», así como a quienes viven en
situaciones de guerra y genocidio, y las que luchan por los derechos
humanos.
Han reivindicado «una igualdad social y laboral real», ante las
diferencias de salario, las «cargas invisibilizadas» en el ámbito
doméstico y la «precariedad», para lo que han exigido «medidas efectivas
para poner fin a esta injusticia y garantizar una redistribución
equitativa de las responsabilidades y oportunidades».
Igualmente, han exigido «espacios seguros y libres de sexismo y
violencias sexuales» y abordar «con urgencia las desigualdades en la
atención médica que afectan gravemente su salud»; con la denuncia de
«todo tipo de violencias machistas».
Denuncian las «muchas caras» de la violencia: «sexual, física y
psicológica, hasta la institucional y económica» y han exigido medidas
«contra todo tipo de mercantilización de los cuerpos de las mujeres,
como los vientres de alquiler y la compra-venta de óvulos», así como
aprobar «legislación abolicionista del sistema prostitucional y
pornográfico, donde todos los días millones de mujeres y niñas están
sometidas a violencias brutales».
«La prostitución no es un trabajo y
nunca conseguiremos la igualdad mientras exista», sostienen.
Además, piden implantar «una verdadera coeducación que enseñe la
igualdad y erradique los estereotipos y roles de género».
Por último,
insta a «estar más unidas y determinadas que nunca para desmontar el
discurso reaccionario y retrógrado» del gobierno valenciano con «una
derecha y extrema derecha negacionista de las violencias machistas».
Por su lado, la manifestación convocada por Assemblea Feminista se ha
iniciado en el CIE de Zapadores, desde donde ha llegado a plaza de Sant
Agustí y seguir hasta la plaça de la Mare de Déu.
Encabezada por la pancarta 'Els feminismes recordem, resistim i
construïm des de la rebel·lia. Transfeminismes antiracistes de
Valencia', se han visto otros lemas como 'Qué hace un machista como tú
en un siglo como este' o 'La identidad de género no se debate, se
respeta'. También han proferido cánticos como 'Fora agressors de la
universitat', 'Feminisme no és transfobia' o 'Con o sin ropa, mi cuerpo
no se toca'.
Silvana Cabrera, portavoz de la Assemblea Feminista, ha denunciado
que cuatro meses después de la dana «sigue habiendo todavía muchísimas
necesidades básicas, sobre todo para las mujeres y para personas en
situación administrativa irregular».
Durante la lectura del manifiesto, han mostrado la «rabia y dolor por
la gestión criminal de la dana» con el «abandono» de las personas y
donde los «colectivos feministas, antirracistas y anticapitalistas
fueron la base de las redes de apoyo mutuo que han surgido como
respuesta a la catástrofe».
«Entre el barro y los escombros, hemos
visto, de nuevo, que un sistema que prioriza el beneficio económico a la
vida es insalvable», subrayan.
Al respecto, lamentan que se viven años «de crisis en crisis,
provocadas y aprovechadas por el capital depredador y ecocida para
aumentar las desigualdades, entre el norte y el sur globales, entre
personas ricas y pobres, blancas y racializadas, personas cis y
disidentes de género, entre hombres y mujeres».
En el caso de la dana, denuncian que «ninguna administración, ni la
Generalitat ni el Gobierno estatal, han tomado medidas contundentes para
evitar que las vidas más vulnerables queden atrás».
En concreto,
indican que, según el Ministerio de Igualdad, ha habido un «repunte» de
la violencia machista en los territorios de la dana y reprocha que se
han tomado «medidas insuficientes»; mientras que la Generalitat «no ha
tomado ninguna».
«Este abandono institucional afecta todavía más las trabajadoras más
invisibilizadas y en situación de precariedad, como las trabajadoras del
hogar internas o también las trabajadoras sexuales, que no tienen
reconocido su estatus como trabajadoras y muchas de ellas no tienen su
situación regularizada», censuran.
Igualmente, lamentan que «la extrema derecha aprovecha el miedo y la
incertidumbre para extender su discurso misógino, racista y LGTBQfóbico»
y denuncian que «el fascismo continúa ganando terreno porque la
socialdemocracia lo tolera y le da alas».
Por ello, las «transfeministas antirracistas» han instado a recordar
que no pueden «vivir alienadas ni de la historia ni del territorio», a
resistir para «impugnar este sistema» y a construir redes de apoyo
mutuo.
También se han llevado a cabo manifestaciones por el 8-M en Castellón,
este sábado por la mañana, y en Alicante, en este caso convocada por
Mujeres Feministas de Alicante.