Con la presentación del nuevo Mapa, pendiente de aprobación por la Comisión de Seguimiento de la Ampliación del aeropuerto (CSAM), se abre hoy el plazo previsto por la Ley para recibir alegaciones y que AENA ha ampliado a 60 días hábiles, frente a los 30 días que establece la Ley del Ruido 37/2003, según informó el gestor aeroportuario.
Con esta medida, el ente aeroportuario pretende fomentar la participación ciudadana y el acceso a la información en materia de medio ambiente. AENA acordó con el Ministerio de Medio Ambiente la actualización del mapa estratégico de ruido del aeropuerto madrileño para que incluyera los incrementos de tráfico registrados en los últimos dos años con datos completos de 2006 y 2007.
El aeropuerto de Barajas alcanzó en 2007 el cuarto puesto en la lista de las instalaciones europeas con mayor tráfico de pasajeros con un crecimiento del 14% respecto a 2006 hasta los 51,8 millones de pasajeros, frente a los 41,7 millones que registró en 2005.
En cuanto a operaciones, durante el año pasado se registraron un total de 481.885 movimientos de aeronaves, frente a los 414.370 aterrizajes y despegues realizados en el aeródromo madrileño en 2005.
AENA destaca su compromiso con "la transparencia total" en el proceso de actualización de la huella sonora en el aeródromo madrileño. "El desarrollo sostenible es un objetivo estratégico de todas las instalaciones de la red y del aeropuerto de Madrid-Barajas en particular, y, fruto de ello, es la especial sensibilización que la entidad pública tendrá con las poblaciones del entorno en todo el proceso de actualización del citado mapa", destaca la nota.
AENA recordó las distintas medidas puestas en marcha en los últimos años para limitar el impacto del ruido de los aviones en las cercanías del aeródromo madrileño. Así, informó de la insonorización de 12.514 viviendas en la zona de Barajas, del total de 13.222 peticiones presentadas, con una inversión de 129 millones de euros, lo que supone la ejecución del 99% del total de las obras de aislamiento solicitadas.
Entre otras medidas, se han establecido condiciones de utilización de las pistas, en función del horario de uso --diurno o nocturno--, así como de las rutas de salida y llegada en función del tipo de aeronave.
Para ello, se ha implantado un sistema de clasificación de aeronaves por "cuota de ruido", que prohíbe la operación de las aeronaves ruidosas para la franja horaria comprendida entre las 23.00 y las 7.00 horas. Además, se han optimizado las rutas para minimizar el impacto sonoro en las poblaciones del entorno aeroportuario.
En la misma línea, se han restringido las operaciones a aquellas aeronaves que cumplan con un escaso margen los estándares de certificación acústica definidos por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).
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