De acuerdo con lo establecido en la junta general de accionistas del pasado 7 de marzo, el día 17 de ese mes se repartió un dividendo complementario del ejercicio 2008, de 0,055 euros, que se sumó a los 0,025 que se repartieron en julio y octubre.
La entidad obtuvo un beneficio neto de 39,9 millones de euros en el primer trimestre de 2009, lo que supone un ligero aumento del 0,46% respecto al mismo periodo del año anterior, y situó su morosidad en el 3,66%, frente al nivel del 2,99% con que cerró 2008.
Según informó el banco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el consejo de administración expresó hoy su satisfacción por estos datos en la actual coyuntura, dada la "fortaleza, solvencia y generación típica de los beneficios", tras dotar más de 18,1 millones de euros para insolvencias futuras.
Gracias a esta dotación, realizada por criterios "de prudencia", la cobertura de la morosidad se mantiene por encima del 70% en la actualidad, frente al índice de 79,8% registrado tres meses antes, incidió el banco.
El órgano de gobierno de la entidad que preside José Luis Olivas también incidió en su cómoda situación de liquidez y política de prudencia, ya que el banco sólo afronta este año vencimientos por 300 millones de euros, y de 500 millones en 2010.
El margen de explotación creció un 47,26% y alcanzó 110,6 millones de euros, el margen bruto alcanzó los 157 millones de euros (+32,81%), y el margen de intereses se elevó a 110,4 millones de euros, lo que significa un 21,8% más.
La entidad ha priorizado su actividad comercial hacia la captación de recursos reinvertibles, que alcanzan 16.492 millones (+9,17%), y el total de recursos gestionados se sitúa por encima de 17.240 millones, con un crecimiento interanual del 6,73%, mientras que el crédito a la clientela creció un 2,94%, hasta 18.400 millones.
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