El diputado en el Congreso por Iniciativa, Joan Herrera, registró el 8 de enero, y 4 de febrero, dos preguntas parlamentarias, en las que pedía al Gobierno celeridad para adoptar todas las medidas posibles para evitar la destrucción de un Bien de Interés Cultural y de un Conjunto Histórico Artístico, como era declarar un acto de expolio.
Herrera tomó esta decisión después de que el Ministerio de Cultura declara expolio las actuaciones prevista por el ayuntamiento de Valencia en el barrio de El Cabanyal, pues entendía "que este precedente abría las puertas para la protección del Parque Ribalta de Castelló, amenazado por el proyecto del TVRCas".
Herrera, igualmente, presentó a finales de febrero una Proposición no de Ley (PNL), "para exigir al Gobierno, y sobre todo al PSOE, que además de las respuestas escritas, se votara directamente en el Congreso la petición para declarar acto de expolio la actuación del Consell de la Generalitat y del Ayuntamiento con el parque Ribalta", a lo que el PSOE accedió.
Desde el Gobierno central se indicó que "deben obtenerse las informaciones suficientes, entre ellas las referidas a las Administraciones Públicas implicadas, que permitan aclarar la existencia de expoliación o el peligro de que se produzca", según afirmó Herrera.
"Si la información necesaria para actuar no se aporta en un cortísimo plazo, si el Gobierno no actúa con la urgencia máxima, podría darse el caso de decretarse la Orden Ministerial después de estar hecha toda la destroza del parque", añadió.
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