Valverde ha asegurado en un comunicado que este argumento" es el reconocimiento implícito de que sí defraudó, lo que hace del todo inadmisible que el PP de Castellón, con Alberto Fabra, Javier Moliner, Marisol Linares, Vicente Rambla y los Francisco Martínez y Vicente Aparici de turno, lo siga defendiendo".
En este sentido, el secretario de Organización socialista ha precisado que, desde un punto de vista procesal, "se entiende perfectamente que un presunto delincuente utilice todas las argucias legales para evitar una condena, pero en democracia, un cargo público, y menos de la relevancia de Fabra, no puede escudarse detrás de una presunta prescripción para justificar un presunto fraude fiscal continuado".
Por todos estos motivos, Valverde insiste en que "todo el PP de Castellón será responsable del desenlace del caso Fabra", después de que "a pesar de los graves indicios y de la decisión del juez de Nules de seguir adelante con todas las imputaciones" del presidente de la Diputación, "le sigan defendiendo sin fisuras".
Para el secretario de organización, "los más de 70.000 desempleados de la provincia de Castellón, así como toda la ciudadanía en su conjunto no se merece a una cúpula el PP que sigue defendiendo a un presunto defraudador a pesar de ser evidente que está a punto de sentarse en el banquillo de los acusados".
Valverde le pregunta a Fabra "a quién le echa la culpa ahora, porque hasta el momento, todo era un montaje de Vilar; después de los fiscales; después de los inspectores de Hacienda y ahora sólo le queda atacar al juez, que es quien mantiene su imputación en lugar de haber archivado la causa".
El dirigente socialista ha insistido en que "al PP ya no le quedan más cartas en la manga y, por tanto, será responsable directo de todo lo que pase finalmente con Fabra" y ha agregado que "cada minuto que el presidente del PP, Mariano Rajoy, le mantiene en el cargo, supone un insulto para la decencia y la dignidad de la provincia".
"Basta poner el nombre de Carlos Fabra en Google para ver que prácticamente todas las entradas que aparecen son relativas a corrupción, fraude fiscal, tráfico de influencias, cohecho, insultos a la oposición, en definitiva un largo listado de actitudes impropias de una democracia moderna como la que tenemos y que hace que todo Castellón se avergüence del presidente de la Diputación que tenemos", recalca.
Además, ha mostrado su perplejidad por "declararse inocente cuando en seis años ha sido incapaz de aclarar a la opinión pública y en el propio juzgado --donde se negó a declarar-- el origen de los ingresos millonarios que ha estado recibiendo en sus cuentas bancarias".
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