ALICANTE.- La diputada de Compromís en las Corts Valencianes Mireia Mollà ha considerado que el PP "tiene vergüenza de los casos de corrupción", en función del "escalón" político de los implicados, de modo que los "'mindunguis' de Emarsa sí les dan vergüenza" pero no la tienen del 'caso Brugal'.
Durante una rueda de prensa en Alicante, para hablar de los presupuestos en la provincia, Mireia Mollà se ha referido de este modo, preguntada por los medios de comunicación, al rechazo del PP a aprobar una iniciativa parlamentaria de Compromís para crear una comisión de investigación sobre las presuntas irregularidades del 'caso Brugal', relativo al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Alicante.
En este sentido, Mireia Mollà ha subrayado que el mismo día que se rechazó crear una comisión de investigación sobre Brugal, se aceptó crear otra para Emarsa y, además, el PPCV anuncia que la Generalitat se personará en la causa "por vergüenza".
"¿Es que no tiene vergüenza de lo que ha pasado con el PGOU de Alicante?; ¿cuánto vale el silencio de Díaz Alperi y de Castedo y, sobre todo, cuánto vale el silencio de Ortiz?", ha preguntado Mollà, quien ha considerado que esto "va por escalones: de los 'mindunguis' de Emarsa sí que se tiene vergüenza, pero si el escalón es más alto, no. No vaya a ser que salpique también a la cúpula del poder en Valencia".
Así, según ha dicho, "esa vergüenza" por el PGOU de Alicante "la tenemos que pasar todos, pero el trámite del banquillo lo tendrá que pasar sola Castedo, lo tienen asumido y vamos a ver con Castedo lo mismo que pasó con Camps".
A su juicio, "el PP podría haber convertido una comisión de investigación en papel mojado", por lo que "lo importante era que se paralizara la tramitación del plan".
"A ver qué hacemos con el PGOU si, después de que se apruebe, el juez dice que está impregnado desde la primera a la última página de corrupción", ha comentado.
En cuanto a la comparecencia de Castedo en las Corts, Mollà ha dicho que la alcaldesa de Alicante argumentó su intervención "con delirios del Rey Sol, con una estrategia que realiza una persona bajo el delirio absoluto de que ha perdido el norte".
En su opinión, Castedo "salió creyéndose ya imputada y no habló sobre las responsabilidades políticas, ni tampoco sobre lo que hay detrás: conversaciones, chanchulleo, intereses.... fue incapaz de explicar qué beneficio da a los alicantinos que le regalen coches y qué alicantino se beneficia de este tipo de relaciones".
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