MADRID.- El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria
(FROB), organismo dependiente del Banco de España, podría designar a un
tercer experto independiente para realizar la valoración económica de
BFA-Bankia, informaron hoy fuentes financieras.
El FROB designará próximamente a dos expertos indendientes,
auditores o bancos de inversión, para llevar a cabo la valoración
económica de la entidad con el fin de determinar la participación que
tendrá el Estado en su accionariado tras la conversión en capital del
préstamo público de 4.465 millones de euros.
Si las valoraciones llevadas a cabo por los dos expertos
independientes se separan en un 2% se realizará una media de ambas que
dará lugar a la definitiva, mientras que si la brecha es superior al
10%, habrá que nombrar a una tercera firma cuya conclusión permita
acercar las cifras.
Es previsible que las conclusiones de esta valoración
económica no difieran en gran medida de la estimación del Ministerio de
Economía, que el 9 de mayo calculó que el Estado contaría con una
participación del 100% en el capital de Banco Financiero y de Ahorros
(BFA), lo que se traduce en una participación superior al 45% de su
filial cotizada Bankia.
Esta valoración es independiente de la auditoría que el
Gobierno ha encargado a Goldman Sachs sobre los activos de BFA-Bankia,
vital para determinar las ayudas públicas que requerirá la entidad en
proceso de nacionalización.
La firma norteamericana trabaja estrechamente con el
departamento que dirige Luis de Guindos para evaluar la situación de
BFA-Bankia, que aún no ha presentado a la Comisión Nacional del Mercado
de Valores (CNMV) los resultados anuales auditados.
La entidad que ahora preside José Ignacio Goirigolzarri
presentará en los próximos días al Banco de España el plan de
cumplimiento del saneamiento para afrontar las exigencias de provisiones
y capital establecidas por los últimos decretos ley sobre el sistema
financiero aprobados por el Ejecutivo.
La valoración de los activos de BFA-Bankia que realice Goldman
Sachs permitirá determinar los eventuales recursos públicos adicionales
que necesitará la entidad.
A falta de que se concrete de qué manera se articularán, éstos
apoyos públicos podrían materializarse a través de bonos contingentes
convertibles, los conocidos como 'cocos' en el argot financiero, que
llevarían aparejado un tipo de interés de alrededor del 10%, o a través
de ayudas directas.
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