VALENCIA.- Este febrero ha sido un mes «muy cálido» y «seco» en la Comunitat Valenciana, con una temperatura media de 11,8ºC, que se sitúa 2,9º por encima de la climatología de referencia (8,9º), y una precipitación acumulada de 11,9 l/m2, que es un 64 por ciento inferior que la del promedio climático del periodo 1991-2020 (33,3 l/m2), según el resumen mensual de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Con estas cifras, febrero de 2024 es el tercer mes de febrero más cálido en la Comunitat Valenciana desde 1950, tras febrero de 2020 y de 1990. No obstante, en algunas localidades del interior y prelitoral norte, como Atzeneta del Maestrat (Castellón) ha sido el mes de febrero más cálido de la serie, al superar en casi medio grado a febrero de 1990 y 2020, y sin ningún día de helada, cosa que nunca había ocurrido en este observatorio en un mes de febrero desde que comenzaron a registrarse datos en 1944.
Hasta el día 22 las temperaturas estuvieron de forma persistente por encima de los valores normales, el descenso de temperatura a partir del día 23 unido al viento, dieron lugar a un ambiente invernal que se ha prolongado los primeros días de marzo.
Salvo el breve pico frío que se produjo el día 11 de febrero tras el paso de la borrasca Karlotta, las primeras tres semanas del mes tuvieron, de forma persistente, temperaturas muy superiores a los valores normales para esta época del año. Así pues, este periodo tuvo una temperatura media sin precedentes en la Comunitat Valenciana desde, al menos, 1950.
El día más cálido del mes fue el jueves 22 que supuso récord de día cálido, el séptimo del año, tras los seis que se registraron en enero. Las temperaturas más altas superaron los 27ºC el 21 y 22, con 27,9º en Alicante y 27,5 en Xàbia (Montgó) y Crevillent.
Por otra parte, las temperaturas más bajas se registraron el lunes 5, con -3,5ºC en Ademuz, -3,0ºC en Villena y -2,5ºC en Jalance. Los últimos días del mes las temperaturas «se normalizaron», con un descenso térmico que, unido al viento fuerte de oeste y noroeste, dieron lugar a la sensación de ambiente invernal, que se ha prolongado durante los primeros días de marzo.
Al desagregar los datos entre temperaturas mínimas y máximas, se aprecia una mayor anomalía térmica en las máximas diurnas, ya que las noches han tenido una anomalía de temperatura de +2.5ºC, mientras que la anomalía de las máximas diurnas ha sido de +3.4ºC.
En esta misma línea, las mayores anomalías de temperatura se han registrado en el interior de la mitad norte, con valores medios entre 3 y 4ºC más altos de lo normal, que llegaron a alcanzar los +4ºC de anomalía en Fredes (Castellón), mientras que en el litoral de la mitad sur la anomalía ha estado entre +2.0º y +2.5ºC.
La precipitación acumulada ha sido 11,9 l/m2 , que es una cantidad un 64% inferior que la del promedio climático del periodo 1991-2020 (33,3 l/m2) y, globalmente, el mes se califica como «seco». De hecho, el carácter pluviométrico ha sido «seco» en las tres provincias, el déficit medio provincial en Castellón ha sido del 70%, del 64% en Valencia y del 60% en Alicante.
El único episodio de precipitaciones significativas y generalizadas, en general débiles, fue el de los días 8 y 9, bajo la influencia de la borrasca Karlotta. Los máximos acumulados en el mes se han registrado en Fredes, con 43,2 l/m2 , en el observatorio del Maigmó (Tibi) se han registrado 36,0 l/m2, y en Utiel 33,6 l/m2.
En el otro extremo, el mínimo pluviométrico, con 0,8 l/m2 se ha registrado en Montanejos. En otros observatorios de comarcas centrales de Castellón, como la capital, Vila-real, Almassora o Borriol, el acumulado mensual es inferior a 3 l/m2 .
Con respecto al valor normal en cada punto, el mes se califica como «muy seco» en el 5% del territorio, situado en comarcas centrales de Castellón y en el litoral norte de Alicante; «seco» en casi dos terceras partes y «normal» o «ligeramente húmedo» en el resto.
Con los datos de febrero, el inicio del año hidrológico 2023-2024, que comenzó el 1 de octubre, es el más seco desde, al menos, 1950, puesto que no hay precedentes de un comienzo de año hidrológico (octubre-noviembre-diciembre-enero-febrero) tan seco como el de este 2023-2024.
En promedio, durante el cuatrimestre se han acumulado 46,3 l/m2 cuando la cantidad habitual es de 238,0 l/m2, con lo que el déficit medio del cuatrimestre en la Comunitat Valenciana es del 81%.
En el mapa nacional de porcentaje de precipitación acumulada en el actual año hidrológico entre octubre y el 2 de marzo, prácticamente toda la Comunitat Valenciana está en la zona en la que la precipitación acumulada es inferior al 25%, por lo que se trata de la zona de más déficit acumulado de España junto a otras zonas de las comunidades del Mediterráneo.
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