VALENCIA.- Una decena de personas afectadas por el presunto robo de bebés entre los años 50 y 80 han iniciado este sábado una serie de concentraciones ante los hospitales valencianos para reclamar el acceso a su historial clínico para poder poner su caso en conocimiento de la Fiscalía.
La primera de estas concentraciones, convocada por SOS Bebés Robados Comunidad Valenciana, se ha producido frente al Hospital Doctor Peset, donde podrían haber tenido lugar alguno de estos episodios, y otros centros como el Hospital La Fe, el Clínico o las clínicas La Cigüeña, El Consuelo o San Rafael, serán el escenario de las reivindicaciones el primer sábado de cada mes.
Según ha explicado una de las integrantes del colectivo, Mª Ángeles de la Fuente, el objetivo de esta acción es denunciar públicamente los impedimentos con que se encuentran las personas que creen haber sido víctimas del robo de un bebé para solicitar su historial y poder acreditar ante la Fiscalía la fecha exacta de su parto o las causas de la muerte de los recién nacidos.
En este sentido, ha explicado que algunos afectados se han dirigido a la gerencia del Hospital Doctor Peset para reclamar estos documentos y se les ha comunicado que "han desaparecido" en inundaciones o se han perdido con el paso de los años, emplazándoles a pedir las historias judicialmente.
"Intentamos hacer a la gente ver que tampoco pedimos nada, tan sólo el acceso a las administraciones públicas, a esos documentos, porque las historias clínicas son propiedad de los pacientes, los hospitales sólo tienen que custodiarlas", ha incidido MªÁngeles, que ha agregado que también en el registro civil se han encontrado con la pérdida de los registros de abortos, nacimientos o defunciones entre los años 1963 y 1973.
Así, los afectados señalan que sin este tipo de información tienen "miedo" a acudir a los juzgados a denunciar porque no pueden probar siquiera haber dado a luz a ningún niño.
La asociación, que reúne a cerca de 200 afectados, tiene constancia de la presentación de cerca de 90 denuncias que han llegado a la Fiscalía, aunque temen que en el momento que la Policía Judicial comience a recabar documentación estas "pérdidas misteriosas" impidan que las denuncias prosperen.
"Pero la Fiscalía nos anima a denunciar, dice que ellos ya buscarán las pruebas", ha agregado Mª Ángeles, convencida de que se trata de una lucha a largo plazo.
Otra de las participantes en la concentración, Vicenta Bono, ha relatado su vivencia personal tras haber sufrido, supuestamente, el robo de dos bebés, un niño en 1974 en el Hospital Clínico, y una niña gemela en 1982, en el Hospital La Fe.
Según asegura esta mujer, que trabajaba como enfermera en el Clínico, en un primer momento no pensó en esta posibilidad. "No soy tan malpensada para pensar que me lo habían robado", ha asegurado.
No obstante, en el caso de la gemela, ha señalado que tras dar a luz quiso bajar a dar el pecho a sus hijas y que las enfermeras se lo negaron hasta que fue su propio marido quien le dijo que una de las pequeñas había muerto.
"Me enseñaron una niña en una cuna tapada totalmente y me dejaron verle un trocito de la cara, mientras el médico le decía a mi marido que ellos se hacían cargo de todo y que yo me preocupase de la otra niña que todavía podía fallecer", ha indicado Vicenta.
Así lo hizo hasta que en el año 2000 vio en la contraportada de una propaganda de piscinas una joven "idéntica" a su hija, que había fallecido a los 13 años de una meningitis.
"Pienso que me lo tiene que investigar la policía. Si no quieren por todas las leyes, que hay muchas en contra y a favor muy poquitas, que exhumen los restos enterrados: si son mis hijos yo descansaré en paz y si no son... ahí ya buscaré yo o buscarán sus hermanos", ha aseverado.
Según ha confersado, decidió entrar en esta 'historia' para quedarse "tranquila" y ha lamentado que cuando acuden a por documentación a las afectadas se les trata "como si estuviéramos locas". Su único objetivo, ha reconocido, es que algún día "se sepa la verdad" y poder "descansar tranquila".
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