Estudiantes se manifiestan en Valencia contra la "mercantilización" de la enseñanza

VALENCIA.- Alrededor de mil estudiantes, según la organización, se manifestaron esta mañana por las calles de Valencia contra el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), conocido como 'proceso Bolonia', por considerar que se trata de una herramienta para "mercantilizar" la enseñanza y para "privatizarla" de forma "encubierta".

Así lo indicó el portavoz del Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans, Adrià Martí, tras la celebración de la protesta, que comenzó sobre las 12.30 horas en la Facultad de Historia de la Universitat de València y finalizó en las puertas de la Delegación de Gobierno de la Comunitat Valenciana.

Para el portavoz de esta entidad, la protesta perseguía "demostrar que la lucha contra Bolonia continua", pese a que este año ya se han implantado los primeros títulos de grado en las universidades. Así, señaló que pretenden "mostrar a los estudiantes y a la calle" que las protestas "no han terminado".

Martí destacó que la asistencia fue "notable", aunque reconoció que ha habido "menos participación" que en las protestas del año pasado. Del mismo modo, apuntó que esta es la primera manifestación desde que comenzó el curso escolar, y señaló que todavía no saben si se organizarán nuevos actos de reivindicación.

Al finalizar la protesta, que tenía como lema 'Aturem la mercantilització, construim un altre ensenyament', los representantes del SEPC leyeron un manifiesto en el que critican que el nuevo sistema de educación "acorta las antiguas licenciaturas y diplomaturas" para "imponer una formación muy precaria" y que los estudiantes "se adapten a trabajos más precarios".

También reprocharon que "sólo se dota a una pequeña élite de estudiantes la posibilidad de acceso a los master de formación específica" y lamentan que el EEES "se impone a base de reales decretos, aprobados sin ningún debate previo, y con la complicidad de los rectorados serviles de las universidades".

Por lo que se refiere a Secundaria, censuraron que "toca sufrir la adaptación de la Selectividad al nuevo modelo", y que se pretende establecer "un sistema por fases para endurecer el resultado general y centrar a los estudiantes sólo en una rama concreta". Además, "se permite las universidades endurecer los criterios de admisión de los alumnos para transformarla en un espacio reservado a una élite".

En este sentido, el SEPC consideró que, ante las protestas iniciadas de los estudiantes, "lejos de abrirse un proceso de debate amplio y constructivo, la respuesta fue una desmesurada represión contra las pacíficas protestas de los estudiantes".

Así, el sindicato señaló que el balance del año pasado ha sido "agridulce", porque "se ha conseguido abrir un fuerte debate social", pero no se ha abierto "un proceso plenamente democrático de reforma del modelo educativo para adaptarlo a las necesidades sociales reales".