ELCHE.- El dirigente del PSOE de Elche Juan Caballero, ex chófer del ex alcalde de Elche y actual diputado autonómico, Diego Maciá, presentó su petición de baja en el partido mediante el envío a la agrupación socialista ilicitana de una carta por correo certificado "con acuse de recibo", tal y como el propio Juan Caballero reconoció a "Información".
La baja de Caballero en el PSOE no sólo agrava la crisis interna del partido, sino que genera aún más incertidumbre sobre el futuro de la concejala de Hacienda, Mari Ángeles Avilés, (su mujer) dentro del equipo de gobierno municipal y que el PSOE siga manteniendo la Alcaldía y no esté expuesto a una posible moción de censura. En estos momentos, el PSOE (13 concejales) gobierna en coalición con Compromís (un concejal), mientras que la oposición del PP tiene 13 ediles.
Juan Caballero apuntó que su decisión "no va a afectar de momento" a lo que ocurra en el futuro con su esposa y el trabajo de ésta en el grupo socialista, si bien sobre este particular no quiso entrar a valorar hipótesis de futuro.
Caballero, miembro de la ejecutiva local, donde ocupaba en la actualidad la secretaría de Actos Públicos, fue destituido recientemente por el alcalde y secretario general de los socialistas ilicitanos, Alejandro Soler, junto a otro cargo de confianza de la etapa de Maciá que continuaba en este mandato, Iván Aranda.
Éste último se había ocupado del gabinete de Prensa municipal. El cese de ambos de su actividad municipal coincidió justo tras la asamblea local del PSOE en la que se elegían a los 13 delegados (8 afines a Jorge Alarte y 5 a Ximo Puig) para el congreso del PSPV que finalizó el domingo.
Juan Caballero aseguró que su petición de baja era algo que "venía meditando desde hace tiempo. Evidentemente, yo no quiero estar ni seguir en el PSOE por todo lo sucedido, pero mi decisión no tiene nada que ver con un "calentón" ni por cómo ha acabado el congreso del PSPV. He estado en este partido veinte años y siempre he tenido responsabilidades en la ejecutiva. Para mí lo del congreso es lo de menos, aunque por lo que he visto puede ser el principio del fin del PSOE valenciano", afirmó.
El ya ex dirigente del PSOE ilicitano añadió que "el jueves pasado acudí a Correos para tramitar la baja, tal y como lo he hecho ahora, pero debido a las lluvias las oficinas no estaban realmente operativas y tuve que esperar".
Juan Caballero afirmó, por otro lado, que sólo él ha tomado esta decisión y no ha realizado ninguna consulta ni recabado opinión de otros destacados dirigentes políticos, como es el caso de Diego Maciá, con quien se siente identificado en lo político y en lo personal.
Aunque la ejecutiva del partido tiene que darle conformidad a la petición de baja, Juan Caballero matizaba que "yo ya me siento totalmente desvinculado del PSOE".
Con la marcha de Juan Caballero del partido se acentúa aún más, pese a la "normalización" de la que días atrás hablaba el secretario y flamante vicesecretario del PSPV, Alejandro Soler, la crisis interna de los socialistas ilicitanos.
Aunque Soler aseguraba que hacía tiempo que había decidido destituir a Caballero y a Aranda, el hecho de hacerlo dos días después de la asamblea local fue interpretado en el sector crítico del partido como una "represalia política" de causa-efecto por ser Caballero y Aranda dos personas afines a Diego Maciá y tras el "voto de castigo" sufrido por Soler en dicha asamblea, con un 30% de las papeletas que rechazaron la propuesta de delegados.
Por su parte, la concejal de Hacienda, Ángeles Avilés, señalaba, a preguntas de "Información", que la decisión de su marido era algo "personal. Llevaba días queriéndolo hacer y he intentado que meditara. Me lo ha comunicado después de hacerlo".
La edil dijo ser consciente de las interpretaciones que se pueden generar. "Esté de acuerdo o en desacuerdo apoyaré todo lo que él haga siempre. Si se piensa bien, es una reacción natural", afirmó la concejal del PSOE, quien quiso dejar claro que su intención no es seguir el ejemplo de Caballero.
"Yo voy a seguir yendo a mi trabajo como hasta ahora y lo voy a hacer con normalidad. Yo no me planteo para nada abandonar el PSOE. Yo sigo confiando en que haya una solución".
La baja de Caballero en el PSOE no sólo agrava la crisis interna del partido, sino que genera aún más incertidumbre sobre el futuro de la concejala de Hacienda, Mari Ángeles Avilés, (su mujer) dentro del equipo de gobierno municipal y que el PSOE siga manteniendo la Alcaldía y no esté expuesto a una posible moción de censura. En estos momentos, el PSOE (13 concejales) gobierna en coalición con Compromís (un concejal), mientras que la oposición del PP tiene 13 ediles.
Juan Caballero apuntó que su decisión "no va a afectar de momento" a lo que ocurra en el futuro con su esposa y el trabajo de ésta en el grupo socialista, si bien sobre este particular no quiso entrar a valorar hipótesis de futuro.
Caballero, miembro de la ejecutiva local, donde ocupaba en la actualidad la secretaría de Actos Públicos, fue destituido recientemente por el alcalde y secretario general de los socialistas ilicitanos, Alejandro Soler, junto a otro cargo de confianza de la etapa de Maciá que continuaba en este mandato, Iván Aranda.
Éste último se había ocupado del gabinete de Prensa municipal. El cese de ambos de su actividad municipal coincidió justo tras la asamblea local del PSOE en la que se elegían a los 13 delegados (8 afines a Jorge Alarte y 5 a Ximo Puig) para el congreso del PSPV que finalizó el domingo.
Juan Caballero aseguró que su petición de baja era algo que "venía meditando desde hace tiempo. Evidentemente, yo no quiero estar ni seguir en el PSOE por todo lo sucedido, pero mi decisión no tiene nada que ver con un "calentón" ni por cómo ha acabado el congreso del PSPV. He estado en este partido veinte años y siempre he tenido responsabilidades en la ejecutiva. Para mí lo del congreso es lo de menos, aunque por lo que he visto puede ser el principio del fin del PSOE valenciano", afirmó.
El ya ex dirigente del PSOE ilicitano añadió que "el jueves pasado acudí a Correos para tramitar la baja, tal y como lo he hecho ahora, pero debido a las lluvias las oficinas no estaban realmente operativas y tuve que esperar".
Juan Caballero afirmó, por otro lado, que sólo él ha tomado esta decisión y no ha realizado ninguna consulta ni recabado opinión de otros destacados dirigentes políticos, como es el caso de Diego Maciá, con quien se siente identificado en lo político y en lo personal.
Aunque la ejecutiva del partido tiene que darle conformidad a la petición de baja, Juan Caballero matizaba que "yo ya me siento totalmente desvinculado del PSOE".
Con la marcha de Juan Caballero del partido se acentúa aún más, pese a la "normalización" de la que días atrás hablaba el secretario y flamante vicesecretario del PSPV, Alejandro Soler, la crisis interna de los socialistas ilicitanos.
Aunque Soler aseguraba que hacía tiempo que había decidido destituir a Caballero y a Aranda, el hecho de hacerlo dos días después de la asamblea local fue interpretado en el sector crítico del partido como una "represalia política" de causa-efecto por ser Caballero y Aranda dos personas afines a Diego Maciá y tras el "voto de castigo" sufrido por Soler en dicha asamblea, con un 30% de las papeletas que rechazaron la propuesta de delegados.
Por su parte, la concejal de Hacienda, Ángeles Avilés, señalaba, a preguntas de "Información", que la decisión de su marido era algo "personal. Llevaba días queriéndolo hacer y he intentado que meditara. Me lo ha comunicado después de hacerlo".
La edil dijo ser consciente de las interpretaciones que se pueden generar. "Esté de acuerdo o en desacuerdo apoyaré todo lo que él haga siempre. Si se piensa bien, es una reacción natural", afirmó la concejal del PSOE, quien quiso dejar claro que su intención no es seguir el ejemplo de Caballero.
"Yo voy a seguir yendo a mi trabajo como hasta ahora y lo voy a hacer con normalidad. Yo no me planteo para nada abandonar el PSOE. Yo sigo confiando en que haya una solución".
No hay comentarios:
Publicar un comentario