VALENCIA.- La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ha afirmado este martes al ser
preguntada sobre la situación en la que podría quedar el grupo popular
en el Ayuntamiento de Valencia, tras las declaraciones de concejales
ante la Guardia Civil en el marco de la Operación Taula, que hay que
"esperar a que todo el mundo declare, a ver qué dice el juez" y a que se
levante el secreto de sumario para saber "qué pruebas hay" antes de
reclamar el acta a los ediles.
Así se ha pronunciado la también
portavoz 'popular' en las Corts tras la Junta de Síndics, en una rueda
de prensa en la que ha manifestado que si hay pruebas contra los
concejales, desde el partido se actuará "con contundencia", pero ha
pedido "prudencia hasta que declare todo el mundo" de cara a una
decisión "de calado" como es pedir un acta, al tiempo que ha admitido
que la situación actual "no es agradable". Además, se ha mostrado
convencida de que, llegado el caso, "la gente, por responsabilidad,
acatará la decisión" que tome el partido en este sentido.
Bonig
también ha apuntado respecto a la gestora que deberá dirigir el PP local
tras la disolución de su dirección que están trabajando en ello, "sin
prisa pero sin pausa". De este modo, "en un breve periodo de tiempo"
estará lista, un plazo que ha situado en torno a 10 o 15 días "máximo"
porque el partido "tiene que estar activo" y, además, hay que seguir
fiscalizando la tarea de gobierno del Ayuntamiento de Valencia.
Por
otra parte, preguntada sobre qué haría ella si estuviera en el lugar de
la exalcaldesa de Valencia y actual senadora del PP, Rita Barberá, ha
respondido: "Yo saldría y daría explicaciones".
Tras conocerse que
Podemos y Compromís han presentado una petición para que la senadora
territorial por la Comunitat comparezca en las Corts, Bonig ha recalcado
que Barberá depende orgánicamente del Senado y debería dar
explicaciones en esa Cámara, en su caso. Se ha mostrado convencida de
que las dará allí o en una rueda de prensa, cuando considere "oportuno".
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