VALENCIA.- El alcalde de València, Joan Ribó, se ha
dirigido por carta al ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes,
para pedirle un plan de apoyo específico a todos los colectivos que
componen el sector fallero tras la decisión de suspender definitivamente
las Fallas de 2020 a consecuencia de la pandemia del coronavirus, unas
fiestas consideradas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad desde
2016 y un "motor económico de primer orden" para toda la ciudad a lo
largo del año.
En la misiva, el
primer edil señala que la suspensión provisional acordada el 10 de marzo
por el Consell, en el inicio de la crisis sanitaria, ya produjo un
"gran revés" para todo el tejido empresarial y cultural de València
donde "más allá del impacto sentimental", las Fallas son un "motor
económico de primer orden".
El consenso alcanzado con el mundo
fallero propuso la celebración al mes de julio si la evolución de la
pandemia lo permitía pero, en estos momentos, señala Ribó, el estado de
alarma actual y el hecho de que gran parte de la Comunitat Valenciana
continúe en fase cero de la desescalada "impide llegar con garantías de
seguridad sanitaria" a la fecha prevista.
Por ello, y tras escuchar una entrevista en la televisión
pública valenciana À Punt, donde el ministro exponía su "admiración" por
la cultura festiva de la ciudad de València, Ribó explica que se
permite escribir la carta para pedirle ese plan específico de apoyo al
sector, expresamente para artistas, pirotécnicos, indumentaristas,
orfebres "y un largo etcétera".
En este sentido, le traslada
que "recoge su guante" cuando señaló que "entre todos" se debía trabajar
en la línea de apoyar al sector y le comunica que le gustaría poder
"concretar" ese apoyo del Gobierno de España para "ayudar y acompañar en
esta transición".
El primer edil valenciano recuerda que el consistorio
incrementó una partida presupuestaria en dos millones y medio para las
comisiones falleras para que pudieran pagar a sus proveedores y paliar
los efectos negativos de la suspensión.
Asimismo, le agradece su "compromiso" con las Fallas y le traslada que
entiende "perfectamente" el "dolor" que, como valenciano, le produjo la
suspensión de las fiestas entonces, que ahora es definitiva.
En
este contexto, se despide con el deseo de que pronto se pueda
especificar "las acciones a desarrollar conjuntamente entre el
Ministerio y el Ayuntamiento para intentar que el impacto de la pandemia
tenga unas consecuencias irreversibles a un sector artesanal tan
expuesto".
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