VALENCIA.- Repartir lotes de productos básicos, hacer
la compra y llevarla hasta los domicilios o incluso ayudar en tareas
domésticas como el lavado de la ropa y tirar la basura son algunas de
las medidas sociales que han implementado los ayuntamientos de la
Comunitat Valenciana para ayudar a las personas mayores y a los
colectivos vulnerables durante el confinamiento y la crisis del
coronavirus.
El Ayuntamiento de Burjassot ha destinado 150.000 euros
para adoptar medidas extraordinarias para atender las necesidades de
las familias y personas solas con menos recursos. El consistorio ha
establecido, por un lado, ayudas económicas para familias vulnerables,
monoparentales y con menores a su cargo que se encuentren en una
situación de precariedad económica, y por otro lado ayudas domiciliarias
para personas mayores solas, personas con diversidad funcional y
dependientes.
El alcalde de la localidad, Rafa García, ha explicado que el
gobierno municipal apuesta por proporcionar apoyo económico a las
unidades familiares que presenten problemas "ya que se garantiza así el
respeto" a que cada uno lleve a cabo "su propia organización doméstica y
alimentaria". Eso sí, deberán justificar qué productos han comprado.
En Paiporta, el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) y
sus profesionales se han adaptado a las necesidades actuales de las
personas mayores y, durante el estado de alarma, hacen la compra a sus
usuarios, además de la ayuda habitual que proporcionaban.
Por su parte, Paterna ha repartido entre las familias
más necesitadas 25 toneladas de productos básicos en 2.000 lotes.
Para
ello, ha desplegado un operativo con más de un centenar de trabajadores
del Ayuntamiento, concejales y asesores del equipo de gobierno, GESPA,
Policía Local y Protección Civil que, completamente equipados con EPIs,
han acercado casa por casa lotes con productos de alimentación,
limpieza e higiene de primera necesidad y una hoja con información sobre
cómo protegerse contra el coronavirus. Esta acción se ha llevado a
cabo, por ejemplo, en viviendas del barrio de La Coma.
Asimismo, el Ayuntamiento de Paterna tramita ayudas de emergencia,
a las que ha destinado una partida de 300.000 euros que podría
aumentarse si persiste el confinamiento.
Además, ha habilitado un servicio dirigido a personas mayores,
dependientes, con diversidad funcional y en riesgo de exclusión para
ayudarles a realizar la compra o adquirir medicamentos, tirar la basura,
ir al hospital o pasear a las mascotas. Cerca de un centenar de
personas han solicitado esta ayuda.
Por su parte, el Ayuntamiento de Quart de Poblet ha
reforzado el servicio de asistencia domiciliaria para mayores y las
personas enfermas que se encuentran solas y aisladas. Proporcionará
apoyo para diferentes cuestiones, como realizar las compras, cocinar,
llevar a cabo el lavado de la ropa o para la higiene personal.
El consistorio apela a la colaboración ciudadana: si alguien sabe
de un vecino que necesite de este apoyo y por el motivo que sea no
pueda solicitarlo, debe informar al Ayuntamiento. Además, se ha
facilitado un servicio de apoyo psicológico y socioeducativo a las
familias, niños y niñas y adolescentes que lo necesiten a través del
número de teléfono 667 916 152.
Igualmente, Ontinyent facilita la compra a domicilio
de alimentos y medicinas a las personas mayores, con movilidad reducida o
vulnerables y ha puesto en marcha un servicio de atención telefónica
para ellas con seis psicólogos municipales. Este servicio hace la
compra, ofrece asistencia psicológica o gestiona traslados al centro
sanitario.
En Morella, la farmacia ofrece servicio de
medicamentos a domicilio en caso de urgencia y el personal auxiliar de
enfermería del Centro de Día ha repartido también medicamentos.
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