La situación sinóptica de este comienzo de marzo se caracteriza por la presencia de un anticiclón situado sobre las islas británicas y una vaguada retrógada que se desliza por su flanco meridional, y de la cual se están descolgando diversas bolsas de aire frío en altura que merodean nuestro territorio. Además, las bajas presiones del norte de África intensifican el flujo húmedo del este-noreste.
Con esta combinación de inestabilidad en capas medias-altas, vientos marítimos y la ayuda de la orografía, las precipitaciones están aseguradas en los próximos días en la vertiente mediterránea, y todo indica que la Comunidad Valenciana será uno de los epicentros de este temporal de levante. Si se cumplen las previsiones de nuestro modelo de referencia, los acumulados serán considerables en varias comarcas.
Mañana la baja en el golfo de Cádiz se disipará, pero quedará la DANA en altura en el norte de África y se producirá un proceso de ciclogénesis en Argelia que acentuará el flujo del este-noreste. Aunque ya han caído algunas lluvias durante la pasada madrugada, se generalizarán e intensificarán a lo largo del fin de semana, por lo que la AEMET ha activado algunos avisos.
Se prevén lluvias moderadas en la Comunidad Valenciana, que serán puntualmente fuertes y persistentes en las comarcas del norte de Alicante y sur de Valencia, donde la orografía exprime las nubes que llegan en este tipo de episodios.
Algunos modelos mesoescalares muestran posibles acumulados locales de más de 80-90 l/m² hasta mañana por la tarde en zonas de la Marina Alta, el Comtat, norte de la Marina Baixa, la Safor y la Vall d'Albaida.
La AEMET ha activado avisos amarillos para hoy y mañana por probables registros de más de 60 l/m² en 12 horas en estas comarcas, sin descartar que de forma aislada se pasen de 20 l/m² en 1 hora. No descartamos que se produzcan algunas variaciones en los avisos.
Todo parece indicar que esta situación de inestabilidad se mantendrá en la Comunidad Valenciana al menos durante la primera parte de la semana que viene. El aire frío en altura se mantendrá y el viento de levante soplará con intensidad, continuando los chubascos en las regiones mediterráneas, que de nuevo serán de cierta intensidad.
La última salida de nuestro modelo de referencia muestra acumulados de más de 150 l/m² en el norte de Alicante y sur de Valencia hasta el jueves, e incluso hay escenarios que dibujan registros de más de 200-250 l/m². Eso sí, como es habitual en esta época predominará la persistencia frente a la torrencialidad, aunque podrán producirse aguaceros intensos y/o tormentosos.
Los mapas han aumentado la probabilidad de que caigan más de 100-150 l/m² hasta mediados de la semana que viene en las comarcas interior de Valencia afectadas por las inundaciones de finales de octubre (esperemos que vayan rebajando algo estas cantidades). Hay que recalcar que esta situación no tiene nada que ver con aquella, pero tampoco olvidar cómo está el terreno. Estas cantidades también podrían darse en buena parte de Castellón.
GloFAS (Global Flood Awareness System), el Sistema de Previsión ante Inundaciones Globales por sus siglas en inglés, es un componente del Servicio de Gestión de Emergencias de Copernicus, que, basándose en el último conjunto de pronósticos de predicción numérica de nuestro modelo de referencia, el HRES-IFS del ECMWF, calcula si es muy probable que se sobrepase cierta cantidad de lluvia a medio plazo.
En su última actualización, avisa de que hay alrededor de un 60-80% de probabilidad de superar los 150 l/m² en los próximos 10 días en las comarcas de la Marina Alta, el Comtat, la Safor y extremo norte de la Marina Baixa. Incluso en este sector intuye una ligera probabilidad de pasar de los 300 l/m². Insistimos que estos registros se acumularían en varios días y no en pocas horas.
En otras zonas del entorno del golfo de Valencia y en las comarcas interiores de Valencia y Castellón la probabilidad de superar este umbral es del 30-50%, según GloFAS. Se pueden producir crecidas en algunos ríos y barrancos de la Comunidad Valenciana, pero en absoluto como las del pasado otoño, que desgraciadamente fueron devastadoras.
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