jueves, 4 de diciembre de 2008

La exposición de bancos y cajas de ahorro españolas a la promoción inmobiliaria asciende a 300.000 millones

GINEBRA.- La exposición de los bancos y cajas de ahorros españoles a los promotores inmobiliarios se eleva en la actualidad a unos 300.000 millones de euros, según un informe de Credit Suisse.

"Casi a diario un nuevo promotor se declara en bancarrota", advierte el analista Santiago López Díaz, que firma el estudio sobre la banca española titulado 'Los precios inmobiliarios nunca caen. ¿De verdad?'.

El experto considera imposible predecir las eventuales pérdidas aparejadas a la exposición inmobiliaria del sistema financiero, pero incide en que además de las inversiones en primera residencia, hay que tener en cuenta las realizadas en tierras, parques industriales y propiedades comerciales, entre otras.

Asimismo, considera que los precios de la vivienda caerán un 30% en los próximos años, dada la sobrevaloración persistente en el mercado, la subida del paro y el endurecimiento de las condiciones de concesión de créditos por parte de las entidades financieras en un entorno de subida de la morosidad.

Los precios de la vivienda "ya están cayendo, y en un porcentaje significativo", tal y como pone de manifiesto el desplome interanual del 40% en las ventas de viviendas de segunda mano, asegura la firma, que calcula un exceso de oferta de entre 1,5 y 2 millones de unidades.

"Estamos justo en el principio de un largo descenso en los precios, tanto a través de un fuerte ajuste en un corto periodo de tiempo, como mediante un ajuste durante un plazo relativamente dilatado con un ajuste significativo en términos reales", pronostica Credit Suisse.

La firma incide además en que la demanda de vivienda encuentra actualmente obstáculos para comprar, dado que las condiciones financieras han cambiado a raíz de la crisis originada por las hipotecas 'subprime' en Estados Unidos, y ahora es más difícil entrar en el mercado.

Hasta hace un año, recalca, el porcentaje de financiación hasta el 80% del precio de la vivienda era el procedimiento habitual, mientras que ahora, con la subida de la morosidad y un entorno de bajada de tipos, los bancos no están dispuestos a ofrecer una proporción tan alta de financiación.

La idea de que los precios de la vivienda en España resistirían debido a que los propetarios prefieren no desprenderse de las casas en periodos bajistas se basa en "tradicionales malentendidos" sobre la formación de precios que suelen provocar burbujas de precios de vez en cuando, sostiene Credit Suisse.

Concretamente, afirma que pese a la creencia de algunos compradores de que un entorno de bajos tipos de interés hace más barato comprar una casa, la mayoría de las hipotecas en España son a tipo variable, y la carga de la deuda no se reduce con el paso del tiempo, sobre todo en el caso de las hipotecas a muy largo plazo.

También advierte de que aunque los ayuntamientos controlen la mayoría del suelo de uso residencial, los precios no pueden subir infinitamente, tal y como demuestra la experiencia en Nueva York y Tokio, ciudades desarrolladas en un espacio limitado en las que los precios acabaron cayendo.

No obstante, Credit Suisse reconoce que la falta de un mercado de alquiler, contar con una de las tasas más elevadas del mundo en cuanto a hogares en propiedad, y el control del suelo por parte de los municipios podrían explicar cierta resistencia de los precios de la vivienda.

La firma desmonta otros "mitos" sobre la vivienda en España, como que alquilar es "tirar el dinero", al indicar que la compra no es una inversión "financieramente eficiente", y destaca el componente "emocional" que define la toma de decisiones en ambos casos.

El problema "real" de los bancos no son las hipotecas, sino los préstamos a promotores, según 'The Economist'

LONDRES.- El problema "real" de los bancos españoles no son las hipotecas concedidas a particulares para la compra de su vivienda, sino los préstamos dados a los promotores inmobiliarios, según un reportaje del sector inmobiliario en España que 'The Economist' publica en su último número.

Según el artículo, titulado 'La pesadilla de los constructores', más del 40% de los créditos inmobiliarios concedidos se dirigen a los promotores, y actualmente se registra una mayor mora en este tipo de prestamos que en las hipotecas.

De hecho, asegura que "la mayoría de los españoles hacen todo lo posible para no perder su hipoteca", que suele estar por debajo del 80% del valor total de la vivienda adquirida y que tiene al propio piso como garantía (e incluso alguna, bienes de los familiares del hipotecado).

En este sentido, 'The Economist' señala los casos de las suspensiones de pagos de grandes inmobiliarias registradas en España, como Habitat o Martinsa, los de firmas del sector que están quedando en manos de los bancos (Metrovacesa y Colonial) o los problemas de Sacyr.

El artículo también presta atención a los particulares, al asegurar que si bien los españoles "no están acostumbrados a que caigan los precios de la vivienda", dado su concepto de vivienda para toda la vida, los precios de los pisos "están cayendo".

No obstante, la publicación reconoce que aunque la vivienda cae más del 1,3% que refleja la estadística oficial del Gobierno, "es difícil evaluar la dimensión total que tendrá el descenso del precio de la vivienda".

"Durante años, los españoles se han quejado de los exorbitantes precios de la vivienda. El mercado se está encargando de solucionarles el problema", concluye el artículo.

Rita Barberá exige conocer el comprador de Mestalla

VALENCIA.- Si el Valencia quiere apoyo de la caja de ahorros y de las instituciones, deberá desvelar la identidad del futuro comprador de las parcelas de Mestalla. No hay vuelta de hoja. Sólo así se planteará la entidad financiera ampliar en 100 millones de euros el crédito que tiempo atrás ya concedió. Y sólo así está dispuesta la alcaldesa a modificar el proyecto aprobado en pleno para el suelo del actual estadio, de modo que se puedan construir tres torres de 25 alturas en lugar de cuatro de 16, según "Las Provincias".

"Yo ya comuniqué al presidente del Valencia que lo que hay es lo que hay (en referencia a la reparcelación) -indicó Barberá-. Si existe consenso se pueden ver los nuevos proyectos, pero necesito saber si hay un comprador. No puedo estar al albur de cambiar un proyecto así como así." La alcaldesa pide información para seguir dialogando y el único camino es que el club le desvele la identidad del adquirente.

Esta es la clave de la situación que vive el Valencia. El exigente acuerdo de confidencialidad firmado en Londres por Soriano y el futuro propietario del suelo de Mestalla ha terminado por sembrar las dudas en torno a la operación. Tanto Bancaja como las instituciones públicas comienzan a temer que la transacción no esté tan cerrada como se pregona.

El presidente del club, sin embargo, se muestra tranquilo. Entiende que lo más popular sería airear la información de que dispone, pero eso tiraría por tierra la operación. De ahí que insista en el hermetismo. Ayer ni siquiera desveló ante su consejo de administración la identidad del comprador. Simplemente confirmó que es extranjero.

En cualquier caso, la demanda de información por parte de Bancaja y de Rita Barberá no debe ser un contratiempo para el Valencia. Tal como avanzó ayer "Las Provincias" e informó por la tarde Vicente Soriano en la reunión del consejo, el futuro comprador de Mestalla ya le ha autorizado a revelar su nombre en estos dos foros.

A cambio, el club accede a retrasar un par de meses el cierre de la operación, previsto inicialmente para fin de año, ya que la enigmática firma ha tenido problemas en una inversión asiática y carece ahora de liquidez.

Las contundentes palabras pronunciadas ayer por Rita Barberá responden a los lamentos de Soriano tras el desacuerdo con Bancaja. El presidente se quejó del escaso respaldo que recibe el club por parte de algunas instituciones, y la respuesta de la alcaldesa resultó igual de directa: "Las Administraciones no somos responsables de los problemas económicos de un club privado."

Así fue la reunión del consejo de administración

Horas después de que Barberá dejara claro su posicionamiento sobre la situación que vive el Valencia, Vicente Soriano se reunió con sus compañeros de consejo. El cónclave lo convocó a raíz de la trascendencia mediática que ha alcanzado en las últimas horas la crisis blanquinegra.

Salvo el núcleo duro del club, nadie manejaba información relevante respecto a las maniobras económicas. Había por ello preocupación y Soriano se ganó a sus correligionarios. Les convenció de que el Valencia saldrá de la crisis y también de que venderá las parcelas. No se habló de la posibilidad de que el club se declare en suspensión de pagos ni de que traspase a alguna de sus estrellas.

El buen rollo se palpó al término de la reunión. Hasta en los pequeños detalles. Los consejeros abandonaron con rostros sonrientes la reunión. La única cara seria, la del portavoz José Pastor, que demostró una vez más que la locuacidad no es lo suyo.

La de ayer no era, en cualquier caso, una cita demasiado comprometida para Vicente Soriano. Empleando un símil futbolístico, se podría decir que jugaba en casa. El verdadero partido lo disputará el Valencia en las oficinas de Bancaja. Aunque no hay una fecha oficial, todo apunta a que el encuentro se producirá mañana. Al menos esa es la intención de la entidad deportiva.

Pese al desencuentro con la caja de ahorros, Soriano no se ha planteado acudir a otro banco. En tiempos de crisis es difícil obtener un crédito, sobre todo a esos niveles, en una institución diferente de aquella con la que se suele trabajar. Ahora queda rematar la faena y demostrar a Bancaja, con documentos en la mano, que el Valencia no juega de farol.

Aumenta la inquietud por el paro entre los españoles

MADRID.- La preocupación de los españoles respecto del paro ha aumentado en el mes de noviembre y el 71,5 por ciento considera que es el primer problema que afronta España en la actualidad, según el Barómetro del CIS hecho público el jueves.

El creciente aumento del desempleo - que ya roza los tres millones según los datos facilitados esta semana por el Ministerio de Trabajo y ha experimentado un incremento interanual del 42,7 por ciento - ha pasado de preocupar a algo más de seis de cada diez en octubre a siete de cada diez.

Los problemas de índole económica ocupan el segundo lugar con un 58,1 por ciento de las respuestas y desplaza al terrorismo y ETA como tercera preocupación con un 21,7 por ciento y la inmigración en cuarto con un 20,3.

La mayoría de los encuestados considera que la situación económica es mala o muy mala (39,6 y 26,3 por ciento respectivamente) y dentro de un año un amplio porcentaje (43,7%) cree que empeorará.

Además, la mitad de los encuestados diced que los problemas económicos son los que más le afectan, seguido del paro con un 34,8 por ciento.

El Barómetro del CIS se realizó con entrevistas a casi 2.500 personas entre el 3 y 9 de noviembre.

España, ante el riesgo de una década perdida / Andrew Hay

España se enfrenta a un dolorosa caída tras el colapso del sector inmobiliario y hay quien teme que el parón podría durar una década si la octava economía es incapaz de encontrar nuevos motores de crecimiento y empleo.

Cada semana, 40.000 personas pierden sus puestos de trabajo, un ritmo endiablado que empequeñece los datos de desempleo de otros países europeos, mientras las turbulencias de los mercados cortan de raíz la financiación extranjera que permitió a los españoles triplicar la deuda familiar y duplicar su renta per cápita en los últimos diez años.

El país se ha encontrado sin sustituto para un desmoronado sector de construcción que aportó el 39 por ciento del Producto Interior Bruto y generó el 40 por ciento de los nuevos empleos en los últimos cinco años, según datos de la patronal del sector SEOPAN.

Nadie espera que España pase de la noche a la mañana a contar con una producción de valor añadido basada en alta tecnología, pero los economistas advierten que debe evitar un desempleo masivo y prolongado tras haber acogido a casi 5 millones de inmigrantes y aumentado su población un 15 por ciento en la última década.

"No cabe descartar el escenario de una década perdida en España. No sé que posibilidades hay y quizás no llegue a una década, pero tampoco me atrevería a descartarlo a juzgar por lo que estoy viendo", comentó Javier Díaz-Giménez, profesor colaborador del IESE.

Después de haber negado durante bastante tiempo los riesgos de una crisis económica, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero ha presupuestado más de 50.000 millones de euros en un intento de estimular la economía mientras los analistas pronostican para 2009 la peor recesión de los últimos 50 años y una cifra de desempleo que rondaría los 3,5 millones.

Zapatero, siguiendo las directivas de la Unión Europa, ha impulsado reformas dentro del costoso sector servicios español.

Pero lo que preocupa a los economistas es el silencio del Gobierno sobre estas reformas, consideradas cruciales para reducir los costes laborales y propiciar una recuperación en forma de "U" a fin de situar el crecimiento en el 3 por ciento en 2012.

Los sindicatos aducen que la falta de competitividad de la economía española se debe a una dependencia excesiva de los sectores de construcción y servicios, y que tanto el sector privado como el público tienen que cambiar de marcha rápidamente.

Si Zapatero opta por la no confrontación con los sindicatos o apuesta por una recuperación de la construcción, el perfil económico español podría parecerse más a la "L" que se prevé para países como Italia y Japón, opinaron analistas.

"El ajuste podría producirse en menos de una década en España si la gente no se aferra a lo que ya tiene", señaló Dominic Bryant de BNP Paribas.

España ha tenido un crecimiento medio del 3,8 por ciento en los últimos diez años, pero no por cuestiones de productividad o innovación, sino por su entrada en el euro, que rebajó drásticamente los tipos de interés.

Con abundante crédito exterior, España creó más de 24 compañías multinacionales, sobrepasó a Italia en renta per cápita y cimentó uno de los sistemas bancarios más estables de Europa.

A diferencia de Japón, España cuenta con una fuerza laboral creciente y relativamente joven. Por otra parte, se diferencia de Italia en que su economía es más flexible y puede adaptarse al marco de desaceleración global, indicó la analista Diana Choyleva de Lombard Street.

En cuanto a los contras, el frenesí constructor ha dejado al país con una bolsa de al menos 1 millón de viviendas sin vender, que al ritmo actual de ventas tardaría unos cuatro o cinco años en agotarse, y con un ratio de morosidad que podría alcanzar el 9 por ciento del total en 2010, según Credit Suisse.

"Ahora la partida se acabó, España no tiene problemas estructurales, sino unos problemas cíclicos exagerados, con altos endeudamientos en familias y empresas", apuntó Choyleva

El Banco de España ha advertido a Zapatero de las medidas de estímulo fiscal que han agotado el superávit presupuestario en menos de un año y que podrían no bastar para resucitar el gasto y la confianza de los consumidores.

El énfasis puesto en las medidas a corto plazo adoptadas recientemente para combatir la desaceleración económica mundial podrían provocar olvidos o retrasos en las necesarias reformas estructurales, señalaba el pasado noviembre el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez.

En las últimas recesiones, España devaluó su moneda, la peseta, para ganar competitividad, pero al formar parte del euro ahora tiene que sufrir un doloroso ajuste en el que los salarios se ven contenidos por el desempleo.

Para facilitar la transición, la OCDE propone acabar con los rígidos contratos indefinidos que hacen más costoso el despido de los trabajadores y bloquea el acceso al empleo a la población inmigrante joven.

El organismo sugiere una revisión de los convenios salariales vinculados a la inflación, que han frenado durante mucho tiempo la competitividad en España.

Los sindicatos han amenazado con la huelga general si el Gobierno intenta recortar los beneficios de los trabajadores durante la crisis y por otra parte los analistas económicos no creen que Zapatero se embarque de manera inminente en una reforma del mercado laboral.

Lo que podría cambiar las cosas son las previsiones que circulan para el desempleo, que podría alcanzar el 18 por ciento en 2010 (desde el 11,3 por ciento del tercer trimestre de este año) e incluso superar el 20 por ciento de la población.

"El argumento de que hay que intentar algo diferente cobrará fuerza cuando las cosas empiecen a empeorar", afirmó Carlos Maravall, economista de AFI.

Font de Mora dice en la BBC que los contenidos en inglés son "simples"

VALENCIA.- El conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, ha defendido en un programa radiofónico emitido hoy por la cadena británica BBC que los contenidos de Educación para la Ciudadanía (EpC) en inglés que se imparten en la Comunitat Valenciana son "muy simples" y contienen "ideas muy generales".

Por ello, y preguntado por el hecho de que en algún caso los alumnos no son capaces de seguir la clase, alegó que eso pasa porque la forma de impartir la materia "no es correcta", ya que "lo más importante es adaptar las clases al nivel de los estudiantes".

Así, en un momento del programa el periodista informa a Font de Mora de que ha visto cómo en un instituto de Gandia se proyectaba una película para después proponer a los alumnos iniciar un debate sobre ella y que estos decían que no eran capaces. A esto el conseller replica que "eso es porque esto no es correcto", ya que "lo más importante es adaptar las clases al nivel de los alumnos".

La BBC emitió un hoy un reportaje realizado por el corresponsal en Madrid de la emisora británica, Steve Kingstone, que aborda el "creciente antagonismo" entre el Gobierno socialista y la Iglesia Católica por algunas decisiones del Ejecutivo y en el que se dedica un partado especial al caso de EpC en la Comunitat Valenciana.

En el reportaje se muestra cómo el periodista británico asistió a una clase de EpC en el instituto Veles e Vents de Gandia (Valencia) y preguntó a la profesora de inglés sobre el conocimiento en esta lengua de sus alumnos, a lo que la docente responde que el nivel "no es tan bueno como el que el conseller cree que los alumnos tienen".

Uno de los ejercicios fue ver una película en inglés para posteriormente debatir sobre ella. El periodista británico interroga a los alumnos sobre su nivel de inglés, cuestión a la que los estudiantes responden con monosílabos ya que, según la profesora, una mayoría "no lo entiende". Por su parte, el locutor confiesa que se encontraría "horriblemente confundido" si él estuviera en la misma situación que los estudiantes.

Más tarde, Kingstone entrevista al director del centro que señala que impartir EpC en inglés es "estúpido" desde el punto de vista del profesorado y subraya que esto se debe a que obedece a "razones políticas de un partido, el PP, inspirado por el catolicismo".

Asimismo, valora los contenidos de la asignatura porque puede ayudar a los jóvenes a "entender algunos problemas sociales", pero se muestra contrario a impartirla en inglés, ya que "no funciona, no funcionará y no puede funcionar porque --los alumnos-- no tienen suficiente conocimiento del idioma para entenderlo", lamenta.

El siguiente paso del corresponsal transcurre en la ciudad de Valencia donde entrevista al conseller Alejandro Font de Mora, al que le pregunta si la decisión de implantar EpC en inglés fue política.

Al respecto, el titular de Educación del Gobierno valenciano responde que "nada de eso", sino que obedece a "un proyecto para introducir el inglés como lengua principal y pensamos que éste era el momento para introducirlo en Secundaria" puesto que en España "necesitamos mejorar en lenguas".

El responsable de Educación asegura que el material didáctico elaborado para impartir EpC en inglés es "muy simple" y contiene "ideas muy generales".

UGT-PV asegura que cada día nueve empresas acuden al Fogasa por insolvencia en la Comunitat entre enero y octubre

VALENCIA.- UGT-PV aseguró hoy que cada día nueve compañías acuden al Fogasa por insolvencia en la Comunitat entre enero y octubre, lo que "sumado a las empresas que han acudido a este organismo por regulación, ha supuesto para un desembolso de 74,2 millones de euros, cifra supera en un 22,6% el importe desembolsado en el mismo periodo de 2007".

El sindicato indicó en un comunicado que, según las cifras hechas públicas el Ministerio de Trabajo e Inmigración en su Boletín de Estadísticas Laborales, en la provincia de Valencia este importe ascendió a 36,8 millones de euros, mientras que en Alicante alcanzó los 29,3 millones de euros y en Castellón los 7,9 millones de euros.

UGT PV destacó el "desorbitado" incremento registrado en la provincia de Castellón, con un aumento del 196 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que el aumento de Alicante se sitúa en el 15,3% y en Valencia en el 13,9%. Para el sindicato, esta situación "explica en cierta medida el claro retroceso que la economía castellonense está padeciendo en los últimos meses".

De esta manera, en la Comunitat Valenciana un total de 9.854 trabajadores se beneficiaron de las prestaciones de este fondo, que asume el pago de salarios e indemnizaciones cuando la empresa padece una situación de insolvencia o está inmersa en un proceso de regulación de empleo, lo que supone un incremento del 13% respecto a los diez primeros meses de 2007.

Para la UGT-PV, estos datos muestran "en toda su crudeza la alta intensidad con que el tejido productivo valenciano está padeciendo los rigores de la crisis, debido fundamentalmente a la nula planificación en materia industrial que se ha ido realizando en la Comunitat Valenciana en los últimos años".

Según el sindicato, en este periodo, "ha primado, con la anuencia de los poderes públicos, el beneficio en el corto plazo y el olvido de cualquier tipo de programación pensando en el futuro".

El sindicato reiteró "la necesidad de aplicar, por parte de las distintas administraciones, políticas expansivas que incrementen la inversión con el objetivo primordial de relanzar la creación de empleo, pues ésta es la única posibilidad de recuperar la senda del crecimiento económico en la Comunitat".