VALENCIA.- El pasado domingo un terremoto afectó al socialismo valenciano con la pérdida de la Generalitat y algunos ayuntamientos, como Castelló. Pese a ello, los cimientos del PSPV-PSOE
están muy sólidos. La diferencia en número de concejales entre
socialistas y populares es de 344 a favor de los segundos. Es decir,
2.300 concejales populares frente a 1.933 socialistas. Más allá de estos números, los socialistas han puesto en valor la fortaleza de su poder local en la provincia de València durante estas elecciones, donde retendrán la Diputació provincial,
junto al apoyo de los concejales de Compromís y de La Vall ens Uneix, según el análisis de Publico.
Precisamente, su líder, el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, fue
absuelto este martes por el caso Divalterra, que tuvo lugar en el
primer Botànic, y por ello, fue separado del PSPV. De hecho, esa
comarca es en la única donde los socialistas no tienen representación,
ya que ha sido sustituida por el partido de Rodríguez.
Esta diferencia aún es mayor si se tienen en cuenta los concejales
obtenidos por las otras fuerzas mayoritarias con representación en Les
Corts: Vox, que ha obtenido 227 votos, y Compromís, con 662. Con estos
datos, la izquierda ganaría en número de concejales (2.555) frente a los
2.527 de la derecha. Por provincias, en número de concejales, la
izquierda ganaría a la derecha en València y Alacant, mientras que la derecha tendría Castelló.
Los pilares para la reconstrucción del socialismo en el País Valencià
pasan por la continuidad del president en funciones de la Generalitat y
líder del PSPV, Ximo Puig,
en Les Corts para capitanear la oposición y su fortaleza provincial.
Así lo indican los números, porque más allá de la pérdida del Ajuntament
de València, donde los socialistas eran socios de gobierno de Compromís
y no gobiernan desde finales de los años 80, han ganado en todos los
grandes municipios de la provincia, excepto Puçol y Alfafar.
Además, en
el área metropolitana de València únicamente corre el peligro una
alcaldía: Torrent, sólo un pacto entre el PP (segunda fuerza) y Vox
(tercera fuerza) evitaría la continuidad del actual alcalde, Jesús Ros¸
que se ha quedado a un escaño de la mayoría absoluta.
El resto de grandes municipios de la provincia de València tendrán un alcalde socialista. Únicamente Alcira no tendrá, y su gobernabilidad pasa por un pacto entre fuerzas progresistas, liderado por Compromís con
seis concejales, junto al PSPV (cuatro), y que deberán pactar con los
Independientes de UCIN (dos). Tampoco, tendrá alcalde socialista Oliva,
donde gobernará el partido local Pro Oliva, que ha obtenido diez
concejales, y donde el PSOE es segunda fuerza y Compromís tercera.
El resto
de grandes municipios de la provincia de València serán gobernados por
el PSPV. Entre ellos, destaca Mislata, cuyo alcalde y actual
vicepresidente de la Diputación, Carlos Fernández Bielsa, se ha convertido en el alcalde más votado de España, desbancando al vigués Abel Caballero y, previsiblemente, será el futuro presidente de la corporación provincial después de acumular mayorías absolutas desde 2011.
Junto a Mislata, los socialistas también gobernarán con amplias
mayorías en Sagunt, Paterna, Aldaia, Alaquàs, Gandia, Rafelbunyol,
Xàtiva y Útiel. Además de Ontinyent, con el exsocialista Jorge
Rodríguez. La única incógnita será Requena, cuya gobernabilidad
depende de una fuerza independiente, y donde también han sido la primera
fuerza más votada. Sólo serían destronados de ese ayuntamiento con un
triple pacto entre Independientes, Vox y PP.
En la provincia de Castelló la situación no ha sido tan buena para los socialistas. Posiblemente la peor, y es la única provincia donde la izquierda no gana en número de concejales.
De hecho, han perdido Castelló, Borriana, Almassora, Benicàssim y
Benicarló. Sólo tienen una mayoría absoluta en Vila-Real, que mantienen
desde 2011, y tienen opciones de amplias mayorías en Vinaròs y La Vall
d'Uxó.
Por su parte, en Morella, la tierra natal del president Puig, el
PSPV mantiene la primera fuerza con cinco concejales, pero deberán
pactar con una fuerza independiente que ha obtenido cuatro concejales.
Los populares con dos concejales podrían dejarles fuera de la alcaldía
si se la dieran a los independientes.
En la provincia de Alacant, por su parte, los resultados no han sido tampoco muy buenos. No obstante, si a los 542 concejales obtenidos por el PSPV
se le suman los 176 de Compromís, la izquierda sería la primera fuerza
en número de concejales. En esta provincia, los socialistas han sido
primera fuerza en Elx, pero un pacto entre PP y Vox podría dejarlos
fuera del gobierno municipal por segunda vez en 40 años.
Precisamente, la comarca del Vinalopó es donde la izquierda tiene
una hegemonía casi incuestionable. Gobiernan con amplias mayorías
progresistas en todos los grandes municipios: Villena, Novelda, Elda,
Petrer y Monòver. El único sin alcalde socialista sería Crevillent, que
tendrá un primer edil de Compromís.
Asimismo, en L'Alfàs del Pi, el alcalde socialista Vicente Arques ha sido el más votado de la provincia de Alacant
en las ciudades de más de 25.000 habitantes. Además, los socialistas
también han ganado con mayoría absoluta en Guardamar del Segura y
gobiernan con una amplia mayoría progresista en Alcoi, Xàbia y Dénia.
En
esta provincia, los grandes agujeros para la izquierda serían las
comarcas de l'Alicantí y de la Vega Baja, donde el PP gobierna con amplias
mayorías en los grandes municipios como Alacant, Torrevieja, Orihuela o
Sant Joan.