VALENCIA.- La recién constituida Plataforma de Afectados
del Banco de Valencia, promovida por pequeños accionistas, ha anunciado
este martes que recurrirá el segundo Expediente de Regulación de Empleo
(ERE) anunciado por la entidad para recortar 890 empleos.
En un comunicado, censura el anuncio de ese expediente dos meses después de acometer un ERE con 360 afectados y destaca que "supone reducir la plantilla en mas de un 60 por ciento".
La entidad señala que, en este expediente, "no se ha tenido en
cuenta la posible integración por la compra de acciones pretendida por CaixaBank"
y sostiene que "es obra de los actuales administradores provisionales,
que están allanando el camino de la candidata a la adquisición
mayoritaria de títulos subvencionados por la aportación del Fondo de
Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB)", a través de la
ampliación de capital aprobada en diciembre.
En este sentido, la plataforma argumenta que en la oferta de CaixaBank, publicada en noviembre en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), "en ningún momento se mencionaba la necesidad de reducción del personal de forma previa a la adquisición".
Así, sostiene que ese "ERE previo" no figuraba dentro de la operativa propuesta por la entidad catalana y "supone un ataque contra los trabajadores de la entidad y lo intereses del banco", realizado por una administración provisional que, a su juicio, "carece de legitimación por su interinidad".
Desde la Plataforma de Afectados de Banco de Valencia acusan al
equipo liderado por José Antonio Iturriaga de estar "haciendo, de forma
anticipada, el trabajo sucio a CaixaBank, sin que existan instrucciones al respecto por parte del FROB".
Además, mantienen que "es incompatible" que la entidad que
opta a comprar Banco de Valencia declarase en noviembre ante la CNMV que
el banco tenía 2.113 empleados en 2012, "no teniendo prevista su reducción como condición de compra",
con que "ahora, antes de que se produzca la venta de acciones y la
entrada del nuevo socio mayoritario, se limpie la plantilla a gusto del
futuro comprador".
Así, la entidad expresa su solidaridad con los trabajadores del
Banco de Valencia y anuncia que se personará ante la administración "en defensa de los intereses de los asociados que son trabajadores",
alegará contra el ERE y se opondrá a su aprobación, para lo que recaba
información en su web plataformadeafectadosbancovalencia.com, en su
correo electrónico y en sus cuentas en Facebook y Twitter.
Esta entidad ya recurrió la pasada semana ante el FROB las
condiciones de venta de la entidad a Caixabank y le solicitó el listado
de personas físicas que hayan actuado en su nombre o designados por él
en la administración, estudios y contrataciones relativas a los
expedientes seguidos en ese órgano para la venta.
La plataforma formuló un recurso de reposición contra la venta de
las acciones y el proceso que se ha seguido ya que, según su portavoz,
Javier Martí Herráiz, "supone una flagrante ilegalidad, al incumplir la
propia normativa del FROB y carecer de la debida transparencia con el
solo objeto de arruinar a los accionistas en beneficio de CaixaBank,
que ha comprado por un euro el banco y percibirá un crédito de entre
4.500 y 6.500 millones, sin tener que pedir el rescate al recibir esa
cuantiosa ayuda de forma encubierta".
En opinión de este colectivo, "todo apunta a que han querido resolver los problemas de CaixaBank
con cargo a la situación del Banco de Valencia contando con la
intervención a favor de la misma de los administradores provisionales",
José Antonio Iturriaga y Margarita Reyes, de quienes cree que "no han
defendido a la entidad y sus accionistas y se han preocupado más en este
tiempo de sus propios intereses y los de la entidad compradora que de
los del banco".
