La futura terminal se ubicará en la explicada que se sitúa entre el Muelle de Poniente y el Muelle Espigón Turia Norte del Puerto de Valencia y la concesión se otorgará por un plazo de 35 años prorrogable hasta un máximo de 50 años, en los términos previstos en los pliegos de condiciones aprobados por el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) el pasado 20 de enero.
En su conjunto, la APV calcula que el proyecto rondará los 20 millones de euros entre la inversión pública y privada. El plazo de construcción es de dos años y para la entrega de terrenos un año más, por lo que de cumplirse los tiempos, se calcula que la nueva terminal de pasajeros estará operativa en 2024.
Para poder optar al concurso, se exige una garantía provisional del 2% del presupuesto de inversión (de ejecución sin IVA) de las obras e instalaciones adscritas a la concesión y una garantía definitiva o de construcción del 5% del presupuesto total de las obras e instalaciones adscritas a la concesión indicadas en el proyecto.
El plazo de presentación de propuestas concluirá el 17 de abril a las 12.00 horas. La apertura del sobre número uno por la Mesa de Calificación y el examen y calificación de documentación para la admisión tendrá lugar el 29 de abril y la apertura del sobre número dos se realizará el 13 de mayo de 2020 a las 9.00 horas.
El pliego de condiciones para la futura terminal de cruceros fue aprobado el pasado 20 de enero tras incorporar una serie de criterios medioambientales, a propuesta del alcalde de València, Joan Ribó. Con estas modificaciones, las bases del concurso otorgaron más peso a los requisitos medioambientales que debe cumplir la concesionaria y su valoración pasa del 4% al 20%.
Los criterios sociolaborales también pasaron a contar más, del 4% a un 5%, y el parking tendrá puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Además, el pliego ya contemplaba otros requisitos como son placas fotovoltaicas en los techos de los edificios de la terminal -su instalación correrá a cargo de la APV- para que sea de consumo cero, un plan de residuos y deberá permitir a los barcos conectarse a la energía eléctrica cuando estén atracados en el puerto.
La futura terminal tendrá itinerarios separados para los tráficos de pasajeros de las líneas regulares nacionales e internacionales, cruceros y carga; una capacidad mínima para 150.000 pasajeros y una capacidad máxima de 2,8 millones al año. Hoy en día el puerto recibe alrededor de 1,1 millones.
La infraestructura prevé contar con cuatro diques, dos de los cuales los construirá la APV -encargada también de hacer las demoliciones correspondientes, el dragado a -12 metros, la rehabilitación de algunos de los elementos a conservar- y la concesionaria los otros dos.