lunes, 26 de octubre de 2009

El tráfico del puerto de Valencia cae un 5,5% en septiembre y se mantiene en contenedores respecto al mismo mes de 2008

VALENCIA.- El puerto de Valencia registró un tráfico global de 43 millones de toneladas durante el pasado mes de septiembre, cantidad que supone una caída del 5,5 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, mientras que el tráfico de contenedores experimentó un "empate técnico", con 2,725 millones de toneladas.

Así lo señaló hoy el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Rafael Aznar, durante la rueda de prensa posterior a la reunión del consejo de administración de la entidad, en la que resaltó que se trata de "un buen indicador" en comparación con las cifras del resto del sector, lo que "es una buena noticia", dijo.

En concreto, el puerto de Barcelona transportó 32 millones de toneladas en septiembre, con lo que su tráfico global experimentó un descenso del 19,5 por ciento, mientras que el tráfico de contenedores cayó un 33 por ciento, hasta 1,3 millones de toneladas.

Al respecto, Aznar celebró que el puerto de Valencia transportó "el doble prácticamente" de contenedores que su principal competidor y que, si bien "es evidente que la situación económica no está despegando", la infraestructura valenciana es la que "mejor" resiste "la huella de la crisis" en la actualidad.

La APV afronta la crisis con el refuerzo de su política de "racionalización del gasto" y el traslado de las inversiones no productivas --básicamente financieras-- a otros ejercicios, mientras mantiene las inversiones productivas, de modo que "no se va a ralentizar nada el plan de expansión actualmente en marcha".

Con ello, pretenden salir de la crisis "fortalecidos" tanto en infraestructuras, con el mantenimiento de las obras de ampliación a "su ritmo", como en "eficiencia" y "productividad", ratio que pasó de un incremento del 32 por ciento a un aumento del 41 por ciento.

Aznar recalcó que su intención es "apoyar clarísimamente" a los empresarios de la Comunitat, para lo que prevén "flexibilizar todos los tratamientos administrativos" de sus concesiones, pero "con absoluto rigor".

"Allá donde encontremos alguna fragilidad o alguna debilidad de nuestros inversores, acudiremos para intentar interpretar con flexibilidad todas las situaciones", resumió.

Respecto a los asuntos del orden del día, aprobados por unanimidad salvo un expediente de responsabilidad patrimonial que solicitó más tiempo para presentar alegaciones y será abordado en la próxima reunión del consejo, el 19 de noviembre.

Preguntado por la resolución de la solicitud de Terminales Marítimas Servicesa S.A. sobre la modificación de su concesión, explicó que desde 2005 debía realizar unas obras de acondicionamiento de la terminal de graneles relacionadas con el aislamiento de emisión de partículas, que no realizó "por razones diversas de presentación del proyecto y alargamiento de logro de la financiación".

Así, pidió a la APV que participase en la financiación de esas obras, algo a lo que "no es posible acceder", dijo. En este sentido, indicó que, si bien es cierto que los graneles sólidos han bajado un 40 por ciento en lo que va de año por su relación con la producción de cemento, "desde el año 2005 eso se tramitó, se adoptó en 2006 y tuvieron tiempo antes de que la crisis aflorase de realizar este tipo de inversiones".

"Las cosas que están en orden las podemos apoyar, pero las que no están en orden, no", sentenció Aznar.

En cuanto a la resolución sobre el recurso de alzada formulado por Terminales del Turia S.A. para que se iniciase un expediente de responsabilidad patrimonial por supuestos daños causados por las obras de ampliación, el consejo de administración ratificó la negativa inicial de la dirección a atender esa demanda por considerarla "una solicitud sin fundamento".

"Su no actividad no está relacionada con la obra en marcha, con lo cual no se les da la razón" y no recibirán ninguna indemnización, porque "no tienen la razón", insistió Aznar, quien recordó que las obras de reacondicionamiento y mejora de los muelles de la terminal del Turia acabarán "en primavera", en torno al mes de abril, aunque la mitad del muelle estará operativo antes por el uso por fases que contempla la ejecución de las obras.

"Somos flexibles en la medida que podemos ser flexibles, pero eso no quiere decir que vayamos a dar razón cuando no la hay", subrayó el presidente de la APV, quien apuntó que el grupo Contenemar podría acudir ahora al juzgado de lo contencioso-administrativo.

Por otro lado, el consejo de la APV aprobó el convenio marco de colaboración a suscribir por VPI Logística S.A. --participada en su mayoría por la APV-- para la formulación conjunta e implementación de los planes de comercialización de los puertos de Gandia, Sagunt y Valencia, y de las Zonas de Actividades Logísticas (ZAL), correspondiente al período 2010-2014, con el que pretenden "configurar una especie de gran pelota de oferta".

Explicó que el equipo de comercialización de VPI Logística "correlaciona la comercialización de áreas logísticas con intermodalidad y con puerto", y que ahora pretenden "sumar los esfuerzos en relación con los navieros" con la "propia operación de eficiencia y productividad", la "concentración de carga" y el "desarrollo de nodos logísticos", para lograr esa "bola de oferta".

El consejo de la APV ratificó también la modificación de la composición accionarial de la planta de regasificación Saggas, en Sagunto, tras la venta de la participación de Iberdrola al fondo de inversiones REEF Pan-European Infraestructures, así como la continuación de la APV como 'protector' del Palau de les Arts y la modificación del censo de empresas consignatarias de buques, con las bajas de Transbull Valencia S.L. y Contenemar Valencia S.A.

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