El Banco de Valencia se reunió este sábado en sesión ordinaria en el Palau de la Música de Valencia donde aprobó las cuentas anuales, el informe de gestión y la aplicación de resultados del ejercicio 2009, en el que se obtuvieron unos beneficios netos de 132 millones de euros, un 12,21 por ciento menos que en 2008.
El presidente del Banco de Valencia, José Luis Olivas, destacó que los resultados obtenidos son "típicos y recurrentes" y resaltó el "fortalecimiento" de la solvencia obtenida por el Banco durante los
últimos años. Asimismo, subrayó "la eficiencia alcanzada, comparándose positivamente en casi todos los ratios del sector con sus competidores".
La Junta aprobó completar un reparto al accionista de 0,055 euros por acción con cargo al ejercicio 2009. El abono de 0,055 euros a partir del próximo martes, 16 de marzo, como dividendo complementario, completará el dividendo total de 0,105 euros, dado que en julio y octubre pasado ya se produjeron sendos abonos de 0,025 euros cada uno.
Además, se realizará una ampliación de capital gratuita de una acción nueva por cada 50 antiguas.
Dada la ampliación de capital gratuita completada en 2009, el Banco de Valencia repartirá con cargo a ese ejercicio 49,2 millones, un 1,5 por ciento más que los 48,4 millones repartidos a los accionistas, con cargo a 2008. La evolución del número de accionistas también ha sido "positiva" durante el año, con un incremento del 12 por ciento, hasta superar los 39.000 accionistas, 4.382 más que hace 12 meses.
La gestión de los recursos propios de la entidad también tuvo "notables avances" durante el ejercicio. Así, destaca haber situado el Ratio de Solvencia por encima del 11,32 por ciento y el ratio de 'core capital' --capital y reservas-- por encima del 6,85 por ciento, ambos en la "banda alta" del sector.
En cuanto a recursos propios computables, situados en 1.848 millones de euros, se consiguió un "exceso" sobre el mínimo legal establecido, de 542 millones de superávit, cuando en 2008 el exceso era de 401 millones.
Tanto el presidente como el consejero delegado, Domingo Parra, mostraron su "determinación y actitud" para la defensa de la acción y el accionista. Olivas aseguró "tanto al inversor estable como a la institución, cartera o fondo que focalice su interés especulador a la baja sobre nuestra acción", que el Banco de Valencia sigue "teniendo capacidad y voluntad de seguir adquiriendo, dado que ofrecemos 542 millones de exceso de fondos propios, así como plusvalías latentes por encima de 123 millones".
También desmintió "cualquier especulación corporativa o de trayectoria" sobre el Banco de Valencia y atribuyó una parte de la "volatilidad" de la acción a "la posición especuladora bajista de carteras, instituciones y fondos".
Por otro lado, la Junta General aseguró que el ejercicio 2009 "no ha sido favorable" para la acción del Banco de Valencia que cosecha una minusvalía del 29,5 por ciento frente a sus índices comparables, sector financiero, Ibex-35, Bolsa de Madrid y Bolsa de Valencia, que se revalorizan un 47,2, 29,8, 27,2 y 34,7 por ciento, respectivamente.
Sin embargo, la acción del Banco de Valencia se ha "revalorizado" en diez años, desde 1999, un 257,7 por ciento, frente al 14,8 por ciento del sector financiero, el 2,5 por ciento del Ibex-35, el 23,1 por ciento de la Bolsa de Madrid y el 38,6 por ciento de la Bolsa de Valencia.
Por su parte, las plusvalías acumuladas en la cartera de participaciones de entidades cotizadas del Banco de Valencia, se sitúan en 123,6 millones de euros. Respecto a ello, las plusvalías extraordinarias obtenidas en el ejercicio se han dedicado íntegramente --82 millones-- a "fortalecer los ratios de cobertura de la morosidad, sin que se hayan incorporado al beneficio".
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