VALENCIA.- La junta directiva de la Confederación Empresarial Valenciana
(CEV) ha manifestado este jueves su "preocupación" por las últimas
noticias relacionadas con el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y ha
exigido que "se garantice el pago de la deuda pendiente a todos los proveedores", a empresas, a organizaciones empresariales territoriales y sectoriales y al "resto de acreedores" de la Generalitat.
En un comunicado, la patronal provincial informa de que los empresarios han puesto de manifiesto que "la elevada morosidad pública y su mantenimiento en el tiempo", unida a las "dificultades de acceso a financiación bancaria", constituyen "un
importante obstáculo para la actividad de las empresas, sus
perspectivas y proyectos de futuro y amenazan incluso su viabilidad".
La reunión de este jueves ha contado con la presencia de la
delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Paula Sánchez de León,
que ha informado de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para
2013, y posteriormente del alcalde de Paterna, Lorenzo Agustí, quien ha
explicado a los empresarios el inicio de los trámites para lograr la
autorización como zona franca para el parque logístico.
El presidente de la CEV, Salvador Navarro, ha lamentado el "importante recorte"
de la inversión real destinado a la Comunitat Valenciana en esas
cuentas, que supone un 35 por ciento menos que el año anterior y la
reducción más acusada tras Navarra y Baleares.
En su opinión, si bien "era previsible que estos presupuestos fueran restrictivos" dada la "contención del déficit impuesta por Europa"
--con la que asegura están dispuestos a colaborar--, no pueden "aceptar
que se agudice la situación de infrafinanciación en términos de
financiación per cápita y de infraestructuras regionalizables y que este
recorte nos coloque en una situación de pérdida continua de
competitividad en relación al resto de las autonomías".
En relación al Corredor Mediterráneo, han traslado a Sánchez de León la importancia de que esta infraestructura "sea considerada y dotada presupuestariamente como una prioridad del capítulo de inversiones"
y han insistido en que la escasez de recursos públicos "exige un alto
grado de responsabilidad de su gestión y dar prioridad a las inversiones
respaldadas por un análisis riguroso que justifique el retorno de la
inversión y su impacto económico y social".
En este sentido, la CEV sostiene que el Corredor Mediterráneo "es la inversión ferroviaria más rentable, por tanto una prioridad",
y lamenta que "ni el Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda
2012-2024 del Ministerio de Fomento ni los PGE así lo hayan estimado,
cuando sin embargo, a nivel europeo fue considerado prioritario incluso
con consignación presupuestaria".
Los empresarios han remarcado que este eje "contribuirá a vigorizar desde una perspectiva económica, y también social, el gran potencial del eje mediterráneo"
y también a "consolidar y diversificar la economía regional, a
enfocarla a actividades de mayor valor añadido y a conectar con el
centro y norte de Europa los puertos de Barcelona y Valencia".
También subrayan que "supone un activo de competitividad clave
para la atracción de inversiones extranjeras que podrían localizarse en
los tres millones de metros cuadrados de Parc Sagunt y que supondrían un
importante revulsivo para la reactivación de la economía regional".
Por otro lado, los empresarios han trasladado a la delegada del
Gobierno su "desacuerdo" con la "paralización de las inversiones para el
acceso de la A-3 a la capital de España y para la V-21 a Barcelona,
máxime cuando son inversiones ya iniciadas y no nuevos proyectos".
En otro orden de cosas, tras escuchar las explicaciones de Agustí,
han valorado la creación de esa zona franca, aunque consideran que el
proyecto "debe ser liderado por el Consell" para coordinarlo con otras iniciativas que "pudieran surgir en otros ámbitos municipales".
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