CASTELLÓN.- Las viviendas visadas caen un 80% en Castellón, el precio de los pisos baja hasta un 10% en localidades como Vinaròs o la capital de la Plana, el paro en la construcción deja sin empleo a 5.000 personas en la provincia durante el pasado año... Y entre tanto titular negativo, un dato, como poco, paradójico: Castellón es la provincia en la que, según los últimos datos de 2008, se formalizaron una mayor número de hipotecas por cada mil habitantes.
La crisis, por el momento, parece no haber afectado a la financiación de la compra de vivienda y parece menos grave de lo que reflejan los datos, al menos sobre el papel, cuando se comparan las viviendas iniciadas en Castellón con el ritmo de la construcción en otras provincias de España, a juicio de "Las Provincias".
El Informe de Coyuntura del Instituto de Estudios de la Fundación Cajamar revela, en datos referidos al segundo trimestre de 2008, que los castellonenses suscribieron 25,2 hipotecas por cada mil habitantes durante el pasado año y que la presión urbanística, pese a la caída experimentada, nos coloca también entre las provincias donde menos se ha reducido la actividad constructora, así como en el tercer puesto de todo el Estado en cuanto a edificios iniciados por cada mil habitantes (6,7).
El dato más sorprendente corresponde al de los préstamos hipotecarios suscritos por los castellonenses durante el pasado año. Las 25,2 hipotecas firmadas por cada mil habitantes colocan a Castellón como la provincia con una mayor actividad en este tipo de créditos en 2008, a pesar de haber registrado un descenso de 1,9 puntos porcentuales, según el informe de coyuntura de Cajamar.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística referidos a octubre, las entidades bancarias concedieron durante los 10 primeros meses de 2010 un total de 6.250 hipotecas menos con respecto al mismo periodo del año anterior, una caída de en torno al 30%.
Y a pesar de la tendencia negativa, el boom de la construcción y de la compraventa de viviendas iniciado hace años en la provincia sigue sirviendo de motor para el sector. Si en 2005, en la provincia de Castellón se formalizaban 27,1 hipotecas por cada mil habitantes, muy por debajo de las 30,5 de Guadalajara, las 34,2 de Girona o las 32,5 de Alicante, en los datos para 2008 que maneja el informe de coyuntura, basados en cifras del Instituto Nacional de Estadística, la provincia de Castellón ha superado a todas las anteriores para situarse como la demarcación de toda España con una mayor tasa de créditos hipotecarios.
La explicación hay que buscarla no tanto en el mantenimiento del ritmo de la construcción sino más bien en los coletazos de la euforia que ha vivido en los últimos años el sector de la edificación de viviendas en la provincia, muchas de ellas iniciadas años atrás pero entregadas en 2008. De hecho, según los últimos datos de compraventa de viviendas del INE, las transacciones inmobiliarias se mantuvieron casi invariables durante octubre, con respecto al mismo periodo del año anterior, e incluso experimentaron un leve incremento.
Aun así, el estudio de Cajamar revela que también la construcción de vivienda nueva ha resistido mejor en Castellón que en otras provincias de España, con una caída de 0,6 puntos y una presión urbanística de 6,7 viviendas iniciadas por cada mil habitantes, muy por debajo de la brusca caída de 13,7 puntos de Almería, los 5,4 de Alicante o los 1,6 puntos menos de Valencia.
En 2005, la tasa de edificaciones iniciadas en Castellón fue de 7,3 por cada mil habitantes. Ya entonces la provincia estaba por encima de las otras dos demarcaciones de la Comunidad Valenciana, aunque por debajo de otras como Tarragona (con 9,2), Segovia (7,6) o La Rioja (9,1). Hoy, sólo superan a Castellón en número de viviendas iniciadas por mil habitantes Guadalajara, con 8,2, y Toledo, con 6,9 edificaciones.
La provincia de Castellón es, además, de las demarcaciones de España con una menor caída de la presión urbanística, que incluso ha crecido en provincias como Soria, León, Teruel o Guadalajara.
La crisis, por el momento, parece no haber afectado a la financiación de la compra de vivienda y parece menos grave de lo que reflejan los datos, al menos sobre el papel, cuando se comparan las viviendas iniciadas en Castellón con el ritmo de la construcción en otras provincias de España, a juicio de "Las Provincias".
El Informe de Coyuntura del Instituto de Estudios de la Fundación Cajamar revela, en datos referidos al segundo trimestre de 2008, que los castellonenses suscribieron 25,2 hipotecas por cada mil habitantes durante el pasado año y que la presión urbanística, pese a la caída experimentada, nos coloca también entre las provincias donde menos se ha reducido la actividad constructora, así como en el tercer puesto de todo el Estado en cuanto a edificios iniciados por cada mil habitantes (6,7).
El dato más sorprendente corresponde al de los préstamos hipotecarios suscritos por los castellonenses durante el pasado año. Las 25,2 hipotecas firmadas por cada mil habitantes colocan a Castellón como la provincia con una mayor actividad en este tipo de créditos en 2008, a pesar de haber registrado un descenso de 1,9 puntos porcentuales, según el informe de coyuntura de Cajamar.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística referidos a octubre, las entidades bancarias concedieron durante los 10 primeros meses de 2010 un total de 6.250 hipotecas menos con respecto al mismo periodo del año anterior, una caída de en torno al 30%.
Y a pesar de la tendencia negativa, el boom de la construcción y de la compraventa de viviendas iniciado hace años en la provincia sigue sirviendo de motor para el sector. Si en 2005, en la provincia de Castellón se formalizaban 27,1 hipotecas por cada mil habitantes, muy por debajo de las 30,5 de Guadalajara, las 34,2 de Girona o las 32,5 de Alicante, en los datos para 2008 que maneja el informe de coyuntura, basados en cifras del Instituto Nacional de Estadística, la provincia de Castellón ha superado a todas las anteriores para situarse como la demarcación de toda España con una mayor tasa de créditos hipotecarios.
La explicación hay que buscarla no tanto en el mantenimiento del ritmo de la construcción sino más bien en los coletazos de la euforia que ha vivido en los últimos años el sector de la edificación de viviendas en la provincia, muchas de ellas iniciadas años atrás pero entregadas en 2008. De hecho, según los últimos datos de compraventa de viviendas del INE, las transacciones inmobiliarias se mantuvieron casi invariables durante octubre, con respecto al mismo periodo del año anterior, e incluso experimentaron un leve incremento.
Aun así, el estudio de Cajamar revela que también la construcción de vivienda nueva ha resistido mejor en Castellón que en otras provincias de España, con una caída de 0,6 puntos y una presión urbanística de 6,7 viviendas iniciadas por cada mil habitantes, muy por debajo de la brusca caída de 13,7 puntos de Almería, los 5,4 de Alicante o los 1,6 puntos menos de Valencia.
En 2005, la tasa de edificaciones iniciadas en Castellón fue de 7,3 por cada mil habitantes. Ya entonces la provincia estaba por encima de las otras dos demarcaciones de la Comunidad Valenciana, aunque por debajo de otras como Tarragona (con 9,2), Segovia (7,6) o La Rioja (9,1). Hoy, sólo superan a Castellón en número de viviendas iniciadas por mil habitantes Guadalajara, con 8,2, y Toledo, con 6,9 edificaciones.
La provincia de Castellón es, además, de las demarcaciones de España con una menor caída de la presión urbanística, que incluso ha crecido en provincias como Soria, León, Teruel o Guadalajara.
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