VALENCIA.- Miles de personas protestaron el martes en Valencia contra los recortes presupuestarios en la educación pública y la represión policial de manifestaciones estudiantiles previas. Y con un mensaje común. "Éstas son nuestras armas", decían mientras alzaban los libros en alto.
El lema "yo también soy el enemigo" fue uno de los coreados por los manifestantes en la manifestación de hoy martes, que pasó cerca del Ayuntamiento, de la comisaria de policía y de la sede del Partido Popular, que gobierna cómodamente tanto la Comunidad como el Ayuntamiento. También se pidió la dimisión de la delegada de Gobierno en Valencia, Paula Sánchez de León, que ha ordenado una investigación sobre la carga policial.
El lema "yo también soy el enemigo" fue uno de los coreados por los manifestantes en la manifestación de hoy martes, que pasó cerca del Ayuntamiento, de la comisaria de policía y de la sede del Partido Popular, que gobierna cómodamente tanto la Comunidad como el Ayuntamiento. También se pidió la dimisión de la delegada de Gobierno en Valencia, Paula Sánchez de León, que ha ordenado una investigación sobre la carga policial.
Estudiantes, padres y profesores se manifestaron por el centro de Valencia ante una escasa presencia policial, al día siguiente de que 25 personas fueran detenidas tras unas violentas cargas policiales que han despertado la polémica por su dureza.
La protesta, que ha transcurrido con escasa presencia policial y sin detenidos, ha comenzado con una concentración en el IES Lluís Vives y una manifestación que ha salido de la Facultad de Geografía e Historia sobre las 15.00 horas.
Las dos protestas se han unido frente a la Estación de Norte de Valencia. Entre las proclamas coreadas por los estudiantes destacan 'Sánchez de León, dimisión' y 'Menos policía y más educación'. De ahí, los manifestantes se han trasladado a la Plaza del Ayuntamiento, donde han criticado a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y han coreado 'Rita, sal, es una mascletà'.
Asimismo, han censurado la actuación policial y han comenzado a saltar durante varios segundos al grito 'Policía el que no vote'. También han pedido que se liberen sin cargos a los detenidos.
Sobre las 17.00 horas, los manifestantes se han desplazado hasta la Delegación del Gobierno de la Comunitat Valenciana, custodiada por ocho agentes de la Policía Nacional, que han sido increpados por los manifestantes durante varios minutos por la actuación de ayer.
Uno de los manifestantes incluso ha lanzado una botella de cristal, que ha caído a los pies de un agente, hasta ese momento sin casco. La mayor parte de estudiantes ha censurado esta acción y, al rato, dos chicas han depositado varios libros de texto frente a los agentes.
Después, otra chica con una pancarta que decía "No nos callareis a porrazos" se ha situado junto a un agentes . Poco a poco, la manifestación se ha disuelto y, sobre las 19.00 horas, los estudiantes se han vuelto a concentrar frente a la Jefatura Superior de Policía, también custodiada por muchos agentes antidisturbios, donde los manifestantes han vuelto a censurar la actuación policial.
La protesta se ha encaminado hasta la sede del PP en la Comunitat Valenciana, que ha sido vallada por la Policía.
Ante la sede vallada del PP
Los jóvenes se han concentrado ante el edificio 'popular' para volver a pedir la dimisión de la delegada del Gobierno en la Comunitat, Paula Sánchez de León, por la actuación policial durante los diversos actos reivindicativos.
Aunque la concentración estaba convocada a las ocho, desde las 19.30 horas se han ido congregando a las puertas de la sede del PPCV en la calle Quart miles de personas, que se han encontrado con que el inmueble había sido protegido por vallas y varios agentes.
Los manifestantes han coreado lemas como 'Menos policía y más educación', 'El pueblo unido, jamás será vencido', 'Estas son nuestra armas' (mostrando las manos vacías) y 'De tanta gaviota hasta las pelotas'.
El grueso de la protesta se ha desarrollado hasta aproximadamente las ocho y cuarto, momento en el que el grupo se ha desplazado hasta la cercana Gran Vía Fernando El Católico y ha interrumpido el tráfico.
Posteriormente, parte de los manifestantes --que llevan recorriendo distintos puntos de la capital valenciana desde el mediodía-- se han dividido y han dirigido los pasos hacia el centro de la ciudad.
La protesta, que ha transcurrido con escasa presencia policial y sin detenidos, ha comenzado con una concentración en el IES Lluís Vives y una manifestación que ha salido de la Facultad de Geografía e Historia sobre las 15.00 horas.
Las dos protestas se han unido frente a la Estación de Norte de Valencia. Entre las proclamas coreadas por los estudiantes destacan 'Sánchez de León, dimisión' y 'Menos policía y más educación'. De ahí, los manifestantes se han trasladado a la Plaza del Ayuntamiento, donde han criticado a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y han coreado 'Rita, sal, es una mascletà'.
Asimismo, han censurado la actuación policial y han comenzado a saltar durante varios segundos al grito 'Policía el que no vote'. También han pedido que se liberen sin cargos a los detenidos.
Sobre las 17.00 horas, los manifestantes se han desplazado hasta la Delegación del Gobierno de la Comunitat Valenciana, custodiada por ocho agentes de la Policía Nacional, que han sido increpados por los manifestantes durante varios minutos por la actuación de ayer.
Uno de los manifestantes incluso ha lanzado una botella de cristal, que ha caído a los pies de un agente, hasta ese momento sin casco. La mayor parte de estudiantes ha censurado esta acción y, al rato, dos chicas han depositado varios libros de texto frente a los agentes.
Después, otra chica con una pancarta que decía "No nos callareis a porrazos" se ha situado junto a un agentes . Poco a poco, la manifestación se ha disuelto y, sobre las 19.00 horas, los estudiantes se han vuelto a concentrar frente a la Jefatura Superior de Policía, también custodiada por muchos agentes antidisturbios, donde los manifestantes han vuelto a censurar la actuación policial.
La protesta se ha encaminado hasta la sede del PP en la Comunitat Valenciana, que ha sido vallada por la Policía.
Ante la sede vallada del PP
Los jóvenes se han concentrado ante el edificio 'popular' para volver a pedir la dimisión de la delegada del Gobierno en la Comunitat, Paula Sánchez de León, por la actuación policial durante los diversos actos reivindicativos.
Aunque la concentración estaba convocada a las ocho, desde las 19.30 horas se han ido congregando a las puertas de la sede del PPCV en la calle Quart miles de personas, que se han encontrado con que el inmueble había sido protegido por vallas y varios agentes.
Los manifestantes han coreado lemas como 'Menos policía y más educación', 'El pueblo unido, jamás será vencido', 'Estas son nuestra armas' (mostrando las manos vacías) y 'De tanta gaviota hasta las pelotas'.
El grueso de la protesta se ha desarrollado hasta aproximadamente las ocho y cuarto, momento en el que el grupo se ha desplazado hasta la cercana Gran Vía Fernando El Católico y ha interrumpido el tráfico.
Posteriormente, parte de los manifestantes --que llevan recorriendo distintos puntos de la capital valenciana desde el mediodía-- se han dividido y han dirigido los pasos hacia el centro de la ciudad.
Desde la sede de los 'populares', la marcha se ha vuelto a dirigir a la Delegación del Gobierno, donde a las 22.00 todavía permanecían varios centenares de personas.
La difícil situación económica que atraviesan las comunidades autónomas, que tienen transferidas competencias como sanidad y educación y están profundamente endeudas, ha llevado a que tengan que aplicar profundos recortes a petición del Gobierno central dentro de su plan de austeridad para recortar el déficit.
Bruselas abrió un procedimiento de déficit excesivo a España en 2009 por incumplir el límite de déficit público fijado por la UE en el 3 por ciento del PIB. Hasta 23 de los 27 miembros de la UE tienen expedientes abiertos por este procedimiento, pero Madrid se enfrenta a una sanción de hasta un 0,1 por ciento de su PIB por no recortar su déficit.
La Comunidad Valenciana, una de las más endeudadas de España, ha iniciado varios recortes presupuestarios en partidas como la educación. Hace unas semanas circularon por Internet imágenes de estudiantes de un instituto alicantino asistiendo a clase con mantas, al parecer porque los centros no tendrían presupuesto para calefacción.
En los últimos días se han sucedido varias protestas de estudiantes contra los recortes, que se han saldado con unos 40 detenidos.
El lunes, 25 personas fueron detenidas, según la Policía Nacional en Valencia, seis de ellas menores. De los 19 menores de edad, siete fueron puestos en libertad y 12 pasaron a disposición judicial. Los medios hablaron además de media docena de heridos, e imágenes mostraban a manifestantes sangrando.
La especial dureza policial registrada el lunes desató las críticas de líderes políticos y encendió las redes sociales en Internet, donde se propagaban vídeos de la actuación de los antidisturbios y se repitieron unas declaraciones del jefe de policía de Valencia calificando a los estudiantes de "enemigos".
El jefe policial valenciano Antonio Moreno, contestó a una pregunta de cuántos efectivos se habían desplegado para sofocar la protesta diciendo: "No voy a proporcionar esa información al enemigo".
El Sindicato de Estudiantes denunció en un comunicado una "salvaje represión policial" y anunció más protestas para los próximos días. En lugares como Madrid, Murcia y Barcelona hubo hoy concentraciones en solidaridad con los estudiantes valencianos.
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