El corredor unirá mediante una línea de altas prestaciones y tráfico mixto el Mediterráneo con el Cantábrico a través de Teruel, Zaragoza y el eje del Ebro, conectará el País Vasco a través de Logroño y de Pamplona y se prolongará desde Bilbao hasta Santander. El nuevo corredor unirá en unas cuatro horas el Cantábrico y el Mediterráneo, frente a las nueve actuales.
Según explicó el ministro, sus características permitirán el tráfico de mercancías sin las limitaciones que tiene la línea actual, lo que permitirá incrementar el potencial de desarrollo industrial que existe en la zona de conexión e impulsar la actividad de seis puertos de importancia internacional: Santander, Pasajes, Bilbao, Castellón, Sagunto y Valencia, uniendo así los del Norte con los del Mediterráneo.
Blanco presentó el estudio funcional del corredor realizado por Fomento, que es una de las principales apuestas del Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT), que va a permitir incrementar notablemente las velocidades de recorrido para conseguir tiempos de viaje más competitivos, albergando al mismo tiempo el tráfico de mercancías.
Los tiempos de viaje está previsto que se reduzcan a menos de la mitad de los actuales, permitiendo, por ejemplo, cubrir la distancia Bilbao-Valencia en menos de cuatro horas, frente a las más de nueve actuales, y situando a Santander a alrededor de 45 minutos de la capital vizcaína.
Asimismo, el ministro indicó que esta línea abrirá un nuevo mapa estratégico del transporte por ferrocarril en España y permitirá a las empresas españolas disponer de un transporte de mercancías de "altas prestaciones" y a la economía española responder a los actuales "retos económicos". Para ello, Fomento multiplicará su esfuerzo inversor en el presupuesto del próximo año, destinando al sector ferroviario más de la mitad de su consignación.
El proyecto está dividido en ocho tramos, entre ellos Santander-Bilbao, cuyo estudio informativo se encuentra ya en redacción y será sometido a información pública en los primeros meses de 2010.
El futuro corredor ferroviario Cantábrico-Mediterráneo servirá para "rediseñar" la red de comunicaciones terrestres en la península, lo que a su vez potenciará las relaciones comerciales entre comunidades autónomas.
Una vez finalizado, se reducirá el tiempo de los trayectos entre
Valencia y Zaragoza (menos de dos horas); Teruel y Zaragoza (en torno a una hora); Zaragoza-Logroño (menos de una hora); Zaragoza-Bilbao (una hora y tres cuartos); Zaragoza-Pamplona (en torno a una hora); Zaragoza-San Sebastián (menos de dos horas) y Bilbao-Santander (45minutos).
Entre Sagunto y Teruel se encuentra el tramo de mayores dificultades técnicas por los problemas orográficos, aunque los trenes que circulen por el corredor alcanzarán velocidades de más de 300 kilómetros por hora. Este año se iniciará el trámite ambiental de consultas previas del estudio informativo.
Entre Teruel y Zaragoza se ha reducido el tiempo ya a una hora y 55 minutos. El tren electrificado llegará a Teruel en 2012 y a medida que se vayan incrementando los tráficos se acometerá la doble vía. En el de Zaragoza-Castejón se están realizando obras en Plasencia de Jalón y Tudela, mientras que en el de Castejón-Logroño se han licitado los contratos para la redacción de los proyectos constructivos. Entre Logroño y Miranda se ha licitado la redacción del estudio informativo.
La conexión con la Y griega vasca se producirá en la conclusión del tramo que unirá Miranda de Ebro con Vitoria-Gasteiz. Respecto a este tramo, se encuentran en redacción los proyectos consultivos y el corredor final tendrá cuatro vías. En el caso del tramo Castejón-Pamplona será el Gobierno Foral de Navarra el que licite los proyectos constructivos.
El estudio de las alternativas a la construcción de la conexión del tramo Pamplona-Y vasca se licitarán antes de fin de año. La 'Y' vasca se encuentra en fase de desarrollo, con algunos tramos en obras y otros en proyecto. Será una doble vía, electrificada, apta para el tráfico mixto y de alta velocidad.
Al acto de presentación del corredor asistieron los presidentes de los gobiernos de Aragón, Marcelino Iglesias; Cantabria, Miguel Ángel Revilla; País Vasco, Patxi López; y Navarra, Miguez Sanz; así como los consejeros de Obras Públicas de Castilla y León, Antonio Silva; de la Comunidad Valenciana, Mario Flores; y de La Rioja, Antonino Gómez.
Todos ellos destacaron la trascendencia de este proyecto como instrumento de "vertebración" territorial y por su importancia para las relaciones comerciales.
Miguel Sanz señaló que Navarra puede asumir "de forma anticipada" la ejecución de las obras de los tramos navarros del futuro corredor, aunque debe firmar con el Gobierno de España un convenio para recibir la encomienda de gestión de esta obra.
Por su parte el 'lehendakari' aseveró que "es posible superar diferencias territoriales, siglas de partidos, para sacar adelante proyectos de país" y opinó que "la política española está muy necesitada de proyectos como este".
Además, ambos se mostraron convencidos de que ETA no logrará frenar este proyecto, aludiendo así al histórico boicot violento de la banda armada y contra los proyectos de comunicaciones terrestres y obras públicas que realiza el Estado en las dos comunidades.
Blanco resalta las "altas prestaciones" del corredor
El futuro corredor ferroviario de alta velocidad Cantábrico-Mediterráneo permitirá a las empresas españolas disponer de un transporte de mercancías de "altas prestaciones", lo que facilitará a la economía española responder a los nuevos "retos económicos", según dijo hoy el ministro de Fomento, José Blanco.
En su visita a la capital aragonesa, en la que mantuvo una breve entrevista personal en privado con el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, y el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, José Blanco subrayó que el futuro corredor permitirá ahorrar costes y tiempo tanto a los viajeros como a las empresas que utilicen esta línea para el transporte de mercancías.
Tras prometer que, desde el Gobierno de España, "seguiremos defendiendo" la reapertura del paso ferroviario internacional de Canfranc (Huesca), Blanco mostró su interés por la travesía central del Pirineo (TCP) y señaló que días atrás se constituyó la Agrupación Europea de Interés Económico, que debe favorecer la priorización de la TCP entre los proyectos europeos.
José Blanco dijo que los actuales "retos económicos" obligan a potenciar las comunicaciones terrestres, ya que el futuro modelo económico español se basará en la sostenibilidad ambiental, la competitividad económica y la cohesión social. España es un "referente" en la alta velocidad ferroviaria y el futuro corredor será "una pieza clave" para relanzar el transporte de mercancáis por ferrocarril, al mejorar la unión de España con Europa y del Cantábrico con el Mediterráneo, afirmó.
El ministro de Fomento manifestó que este proyecto enlazará Pamplona con San Sebastián, "satisfaciendo una demanda social que consideramos necesaria", y además unirá tres puertos, como son los de Bilbao, Santander y Pasajes (Guipúzcoa), con los puertos de Valencia, Castellón y Sagunto (en la Comunidad Valenciana).
El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, recordó que los núcleos comerciales del interior peninsular tuvieron, históricamente, "el condicionante" de no disponer puertos de mar para poder multiplicar de forma eficiente sus relaciones comerciales con países diversos. Con la futura línea Tánger-Algeciras-Zaragoza-Toulouse se revalorizará el transporte de mercancías por el interior español, opinó.
También expresó que el eje ferroviario Cantábrico-Mediterráneo adquirirá un nuevo valor al enlazar con el eje 16 de las redes transeuropeas de transporte (el de la travesía central del Pirineo).
El presidente aragonés señaló que "hemos avanzado mucho en nuevos sistemas de transporte", entre los que citó las nuevas autovías y la mejora de los aeropuertos, aunque recordó al ministro que "nos queda por resolver el bloqueo en el Pirineo central", en alusión el escaso volumen de tráfico que permiten las estrechas carreteras que unen España con Francia por el Pirineo aragonés.
"Aquí sí necesitamos el apoyo del Gobierno de España para desbloquear nuestras comunicaciones", en especial en la parte francesa, más cuando "desde una comunidad autónoma no tenemos interlocución suficiente". Iglesias afirmó estar convencido de que la intermodalidad "es una importante fuente de empleo y de cohesión".
El consejero de Obras Públicas de la Junta de Castilla y León, Antonio Silva, dijo del futuro eje que será un instrumento de "vertebración" y dio la "bienvenida" a "este importante eje ferroviario", sobre todo porque el acto de hoy supone la concreción del proyecto.
Silva destacó el papel de las infraestructuras para el "progreso" y manifestó la satisfacción de la Junta porque uno de sus objetivos es optimizar la línea que une el enclave burgalés de Miranda de Ebro, junto al País Vasco, con la capital riojana, Logroño, lo que eleva el valor de aquella comunidad en las comunicaciones entre las fachadas cantábrica y mediterránea.
El consejero valenciano de Obras Públicas, Mario Flores, transmitió el apoyo del presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, a este proyecto porque incrementará la competitividad de la economía aragonesa, tras lo que aludió a los sucesivos contactos del Gobierno aragonés con el Ejecutivo valenciano al respecto durante los últimos meses.
Flores afirmó que la Generalitat está dispuesta a encontrar fórmulas económicas "que hagan viables" las infraestructuras ferroviarias necesarias y propuso introducir al sector privado en las mismas para acelerar plazos. "Nuestra apuesta por la logística es una realidad", declaró Flores, quien aplaudió que desde el Gobierno de España se impulsen "grandes proyectos que nos permitan seguir creciendo".
El consejero de Obras Públicas de La Rioja, Antonino Gómez Navajas, afirmó que el corredor "ha sido, es y seguirá siendo" el único corredor que une directamente a La Rioja con las comunidades de la cornisa Cantábrica y el Mediterráneo, tras lo que indicó que hasta ahora los avances reales en la modernización de esta histórica línea han sido "mínimos".
El presidente de la Comunidad Foral de Navarra, Miguel Sanz, dijo que "lo importante" es que "nuestras mercancías y nuestros ejecutivos puedan comunicarse de la manera más rápida" con el resto de Europa. Sanz comentó que Navarra puede asumir "de forma anticipada" la ejecución de las obras de los tramos navarros del futuro corredor, lo que está previsto en el Convenio económico de Navarra, aunque precisó que es "imprescindible" que Navarra firme con el Gobierno de España un convenio para recibir la encomienda de gestión de esta obra.
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, expuso que este proyecto también permitirá a la región cántabra quitarse la "espina" que tiene "clavada" con las comunicaciones y que tiene su origen en el abandono de las comunicaciones cántabras desde la dictadura de Miguel Primo de Rivera, de lo cual es prueba la clausura de las obras que llevaron el ferrocarril que abría el paso de Cantabria hacia el resto de España a 36 kilómetros de Santander por el túnel de La Engaña.
Revilla se proclamó keynesiano en lo económico para afirmar que es preciso que la Administración estatal recaude primero para invertir después, ya que "este es el momento de la obra pública".
El lehendakari del País Vasco, Patxi López, aseveró que "es posible superar diferencias territoriales, siglas de partidos, para sacar adelante proyectos de país" y opinó que "la política española está muy necesitada de proyectos como este".
El corredor es "de gran trascendencia" para el conjunto de España y cada una de "las regiones" que atravesará porque creará empleo y también porque "va a vertebrar el país a través de un eje transversal" que permitirá ver cumplir "el histórico anhelo" de unir el Cantábrico con el Mediterráneo, apuntó López.
En sus respectivas intervenciones, tanto el lehendakari del País Vasco, Patxi López, como el presidente navarro Miguel Sanz, se mostraron convencidos de que ETA no logrará frenar este proyecto, aludiendo así al histórico boicot violento de la banda armada y su entorno contra los proyectos de comunicaciones terrestres y obras públicas que realiza el Estado en ambas comunidades.
"No lo van a parar y será un triunfo del Estado de Derecho y las libertades", apostilló López, quien afirmó que este corredor "supone una vía de comunicación con el resto de España y Europa". López pidió acelerar al máximo el estudio informativo para la conexión 'Y' vasca con Navarra y que se active cuanto antes esta conexión. "Nadie ajeno a la defensa de las libertades va a impedir" la construcción de este eje, "hoy amenazado por quienes no creen en la libertad y la democracia", apostilló Sanz.
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