MADRID.- Banco de Valencia, el grupo financiero
nacionalizado más pequeño, va a sufrir el ajuste más duro de todos los
bancos que han tenido que ser rescatados. La ayuda de 4.500 millones de
euros concedida por la Unión Europea tiene como sacrificio el cierre del 90% de la red de oficinas y el despido del 50% de la plantilla de la antigua filial de Bankia, según 'El Confidencial'.
En concreto, La Caixa, que se ha quedado con Banco de Valencia por un euro,
va a clausurar 315 de las 350 sucursales de la entidad con sede en la
ciudad del Turia, por lo que la entidad adquirida se quedará con una
escueta red de 35 puntos de venta. Por su parte, la plantilla se verá
reducida en más de un 50%, por lo que tendrán que salir del banco cerca de 800 de los 1.600 empleados actuales.
Este
brusco ajuste se va a poner en marcha apenas dos semanas después de que
los actuales administradores del Banco de Valencia, los representantes
del Fondo de Restructuración Ordenada Bancaria (FROB), hubiesen llegado a un acuerdo con los sindicatos para aplicar un ERE sobre 390 trabajadores, con el cierre de 70 oficinas. Con ese plan, la plantilla del grupo se había reducido hasta los 1.600 empleados y la red, a 350 oficinas.
CC.OO.
y UGT, que hace quince días expresaron su satisfacción por las
condiciones de los despidos y las prejubilaciones, se temen lo peor.
Aunque la Caixa todavía no les ha comunicado las drásticas medidas que
adoptará a la vuelta de la esquina, los recelos les hicieron ayer enviar
un comunicado en el que pedían que cualquier ajuste se hiciera de forma
pactada y no traumática.
En el ERE actual, la indemnización se fijó en 28 días con un máximo de 18 mensualidades,
además de un complemento de 1.000 euros por cada tres años de
antigüedad. Para los mayores de 50 años la adhesión a los despidos era
voluntaria, y, en este caso, las mensualidades se incrementarán a 24.
Con carácter general, las adhesiones voluntarias al ERE recibirán una
prima de 5.000 euros.
Las prejubilaciones para los empleados con
59 años cumplidos a 30 de junio de 2013 se acordaron con el 80% del
salario neto calculado hasta los 65 años. Todavía no se conocen cuáles
serán las condiciones del nuevo plan de restructuración, pero se da por
hecho que será más duro al ser forzado por la ayuda de 4.500 millones
concedida por la Unión Europea.
Los otros sacrificios
Se trata, sin duda, del ajuste más abrupto de todos los bancos nacionalizados en términos relativos. Por ejemplo, Bankia eliminará unos 4.500 empleos en España (6.000 en todo el mundo), donde cerrará 1.100 oficinas,
tras haber recibido una inyección de capital de 18.000 millones. Es
decir, el 28% de la plantilla y el 39% de los puntos de venta.
Por su parte, Novagalicia Banco tendrá que reducir su plantilla en 2.500 empleados, el 43%,
entre los que están incluidos los 671 de su filial EVO, que pretende
vender dentro de su plan de recapitalización aprobado por Bruselas. La
entidad gallega implantará ese plan de adelgazamiento con la bajada de
persiana de 333 oficinas (incluidas las 120 de EVO Bank) en
contraprestación a los 5.425 millones recibidos de la Unión Europea.
Por último, CatalunyaCaixa,
que será recapitalizada con 9.084 millones públicos, también será
objeto de otro duro ajuste, si bien no ha sido contabilizado todavía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario