Así lo ha destacado la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Maritina Hernández, que lo ha tildado de "fundamental" durante la clausura de la asamblea general de Intercitrus celebrada este martes, en la que se ha elegido como nuevo presidente de la interprofesional citrícola al presidente de Anecoop, Juan Vicente Safont, en representación del colegio comercializador cooperativo.
Safont ha relevado así al representante del comercio, Jorge García, e inicia su etapa al frente de Intercitrus con el objetivo de "normalizar la interprofesional" y "dotarla de actividad y contenido", por "mandato social y político".
"Ni podemos ni debemos tener dificultades en llegar a acuerdos si la visión es de un solo sector con una misma problemática", ha recalcado el nuevo presidente, quien ha reconocido que "el principal escollo de Intercitrus es la escasez de acuerdos". "Nuestros competidores no están aquí".
En la misma línea, ha incidido en que "tener esta interprofesional bajo mínimos no puede ser situación permanente, aunque temporalmente pueda estar justificada".
Safont ha señalado asimismo que "debe ser justo" prestar "especial atención" a las reivindicaciones de los agricultores por tratarse del eslabón de la cadena agroalimentaria que "más sufre las consecuencias de la situación actual".
En su intervención en la clausura de la asamblea, ha abogado por que primen "el acuerdo, la unión y el consenso" en su relación con las administraciones públicas y ha apelado a la "corresponsabilidad en el sector" de los distintos ejecutivos autonómicos para que adecuen su participación en Intercitrus.
Además, ha indicado que si bien "el principal núcleo exportador del sector" se encuentra en la Comunitat Valenciana, "en esta puesta al día de Intercitrus, otras comunidades como Andalucía, Murcia y Catalunya deben tener su espacio adecuado y su participación activa en los debates y acuerdos para que sus peculiaridades sean atendidas y se sientan realmente integrados".
También ha aludido a la necesidad de "no estar al margen de Bruselas" y de convertir en "una cuestión de Estado" los esfuerzos para facilitar la apertura de nuevos mercados.
"Todos debemos de entender que tenemos trabajo por delante y muchas tareas que acometer" para "devolver al sector la dignificación que se merece". "Si lo hacemos desde Intercitrus, lo deberemos hacer desde el acuerdo y el consenso, pero lo deberemos hacer sin convertir la unanimidad en una dificultad", ha sentenciado.
Por su parte, Maritina Hernández ha abogado por "fortalecer las interprofesionales" y "colaborar en la integración de todas las administraciones" en la labor que realiza Intercitrus.
Así, se ha ofrecido a ejercer de "enlace" con el resto de ejecutivos y ha garantizado que trabajarán "para que esa integración, ese compromiso y esa implicación sea real para todas las administraciones", y que lo harán con "espíritu de colaboración y trabajo conjunto".
Ha incidido en la necesidad de colaborar para "eliminar los desequilibrios" del sector, lo que implica "contemplar a la producción como un elemento clave, que tiene que tener garantías de rentabilidad para mantener los niveles de calidad y exigencia que el resto de eslabones de la cadena siguen cumpliendo".
Es más, ha aludido a la selección española de fútbol como ejemplo de "trabajo desde el punto de vista de la unión, de considerarse todos parte de un equipo, de hacerlo con juego limpio --que se debe traducir en relaciones leales entre los colegios de Intercitrus para alcanzar acuerdos--, sin afán de protagonismo, con generosidad para que los acuerdos sean reales y con mucha competencia".
"Hemos recibido una lección extraordinaria de cómo se puede alcanzar el éxito trabajando así", ha concluido.
En cuanto al mercado local, el presidente de Intercitrus considera que "es ridículo ver cómo la aparición de ciertas tiendas de proximidad hacen un flaco favor" en materia de "trazabilidad" y ha criticado que esos establecimientos "echan en saco roto el dinero gastado por productores y comercializadores para mantener controlada la producción" y garantizar unos estándares de calidad.
Al respecto, Safont se ha comprometido a proponer "medidas compartidas" entre sector y administración para afrontar el hecho de que "una buena parte de esa fruta no procede de un trato normal de compraventa" y "hay operadores que hacen funcionar esa fruta", e incrementar los controles de seguridad e inspección.
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