VALENCIA.- El exvicepresidente 'popular' de la Diputación de Valencia, exalcalde de Manises y expresidente de Emarsa, Enrique Crespo, ha ingresado en el centro penitenciario de Picassent para cumplir su condena de 10 años de prisión por el saqueo en la depuradora de Pinedo.
Crespo se trasladó hasta Picassent este domingo, aunque la fecha límite que tenía para hacerlo concluía este lunes, 16 de noviembre, tal y como estableció recientemente la Audiencia de Valencia.
Junto a los 10 años de cárcel, Crespo también fue condenado a 20 años de años de inhabilitación absoluta por un delito continuado de prevaricación administrativa, falsedad en documento oficial y mercantil y malversación de caudales públicos en su modalidad agravada. Se le absolvió del delito de falsedad en documento oficial y malversación de caudales relativo a la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales de la Comunitat (Epsar).
El primero de los condenados por esta causa en acudir a prisión fue el exinformático de Emarsa Sebastián García, conocido como 'Chanín', quien hace una semana ingresó en Teruel. A este condenado se le han fijado siete años como cooperador necesario de un delito continuado de malversación en concurso con falsedad, con la atenuante de confesión.
En total, en esta pieza del caso Emarsa, la principal, fueron condenadas 24 personas a entre nueve meses y 12 años y medio de prisión por delitos de blanqueo de capitales, malversación de caudales públicos, cohecho, prevaricación y falsedad.
El Tribunal Supremo confirmó posteriormente, el pasado mes de septiembre, las penas de cárcel para la mayoría de los condenados en este procedimiento, en el que se desviaron 23,5 millones de euros de dinero público a través de la gestión de la depuradora de Pinedo.
Junto a Crespo y 'Chanín', el tribunal condenó al exgerente de Emarsa Esteban Cuesta a 12 años de cárcel --la pena más alta--; y al exgerente de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales de la Comunitat (Epsar) José Juan Morenilla a nueve años.
Así mismo, el tribunal condenó a Ignacio Bernácer, exjefe de Explotaciones de Epsar, a la pena, tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía y devolver parte del dinero saqueado, de tres años. Para el empresario Jorge Ignacio Roca se acordaron seis años y un día como cooperador necesario de un delito de malversación de caudales público y como autor de otro de falsedad documental.
A Enrique Arnal, ex director financiero de Emarsa, se le fijaron ocho años y seis meses de prisión. Así mismo, al asesor Rafael Quiles se le impusieron dos años y seis meses de prisión.
Para Enrique Sena y Vicente Ros Bartual, relacionados con Notec, se impusieron seis años y un día de cárcel para el primero y seis años y seis meses de cárcel para el segundo como cooperadores de la malversación y autores de falsedad en documento mercantil; para Juan Carlos Gimeno, que fue encargado de gestión ambiental de la planta y posteriormente administrador de Area Este y CRM Adecua, cuatro años y seis meses de prisión; y para Vicente Tomás Benlloch, administrador de Viajes Benimàmet, 11 meses de cárcel.
Estas penas se acordaron en base a que la Audiencia declaró probado que los principales responsables de la empresa pública que gestionó la depuradora de la pedanía valenciana de Pinedo articularon un sistema fraudulento de facturación con el que lograron el desvío de 23,5 millones de euros de dinero público. Para ello se concertaron con varios empresarios que emitían facturas por servicios no prestados o por un importe muy superior al coste real. De este modo, incorporaron a su patrimonio o al de familiares y amigos el dinero defraudado.
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